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TENSIÓN EN EL ULSTER

Heridos 32 policías en la segunda noche de violencia en Belfast

La calma preside la reapertura de la escuela católica de Holly Cross, origen de los enfrentamientos

Al menos 31 policías y un soldado han resultado heridos en las calles del norte de Belfast durante la segunda noche conscutiva de violencia entre católicos y protestantes, según ha informado hoy la Policía norirlandesa, que ha detenido a 11 radicales.

Cientos de jóvenes nacionalistas y unionistas han atacado a las fuerzas del orden con bombas incendiarias, piedras, botellas y proyectiles pirotécnicos en los barrios de Ardoyne y Twaddell Avenue.

Un soldado británico ha sufrido quemaduras en la cara causadas, al aparecer, por ácido sulfúrico arrojado por un grupo de protestantes radicales en Twaddell Avenue.

El brote de violencia comenzó el miércoles cuando los padres de las alumnas de la escuela católica de primaria Holy Cross, en el nacionalista barrio de Ardoyne, se enfrentaron a sus vecinos del barrio adyacente de Glenbryn, de mayoría protestante y donde está la escuela.

Calma en el Holly Cross

Pese a la creciente tensión en la zona, el colegio -cerrado este jueves por temor a nuevos disturbios- ha abierto hoy sus puertas en medio de un fuerte dispositivo policial para proteger a la niñas. La escuela Holy Cross fue el centro de graves disputas el otoño pasado, aunque las partes enfrentadas alcanzaron en diciembre un acuerdo para acabar con los desórdenes.

Un ambiente de calma se ha respirado a primera hora de hoy en la escuela católica tras la noche de disturbios. Los padres han acompañado a sus hijas al colegio sin que se registrara ninguna manifestación protestante en las inmediaciones.

El representante del grupo Derecho Católico a la Educación

Brendan Mailey se ha felicitado por la ausencia de violentos en el barrio de Glenbryn, de mayoría protestante y donde se halla el colegio.

"Queremos que los residentes de Glenbryn pidan a los violentos que abandonen la calle y dejen a la gente caminar en paz. Eso ayudará enormemente a calmar la situación", ha comentado Mailey.

Desde la comunidad protestante del barrio, la portavoz Anne Bill ha calificado de "realmente positivo" el hecho que "no se hayan reanudado las manifestaciones".

Así, la paz ha retornado al área después de dos días de graves enfrentamientos entre católicos y protestantes que se han cobrado un total de 82 policías heridos.