Un atentado suicida ha sido perpetrado esta mañana en un puesto de control militar israelí en Salem, al norte de la ciudad cisjordana de Jenín, en el que ha resultado herido un oficial, según ha informado la radio israelí. El suicida se acercó al puesto de control, activó la carga explosiva que llevaba adosada al cuerpo y estalló.
La víctima es un teniente del Ejército de Israel, que sufrió heridas leves, aunque en un principio se informó de que se encontraba en estado grave por lo que fue enviado un helicóptero a la zona.
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El atentado ha sido reivindicado por la Brigada de los Mártires de Al Aqsa, un grupo vinculado al movimiento Al Fatah, que dirige el líder de la Autoridad Palestina, Yasir Arafat. Este grupo fue incluido ayer en la lista de organizaciones terroristas de todo el mundo que EE UU abrió a raíz de los atentados del 11 de septiembre.
Este nuevo atentado ha coincidido con la reunión de seguridad en Herzelia, al norte Tel-Aviv, entre altos mandos de seguridad palestinos e israelíes, bajo la mediación del general estadounidense Anthony Zinny. La reunión ha terminado sin que se haya alcanzado un acuerdo para el alto el fuego, según un portavoz del Ministerio israelí de Defensa. Sin embargo, la fuente ha asegurado que los negociadores se reunirán de nuevo el domingo.
El Gobierno israelí advirtió esta madrugada al enviado especial de EE UU que no se contendrá por mucho tiempo si los palestinos continúan sus atentados contra objetivos en Israel. El fin de los atentados palestinos ha sido la principal exigencia de los negociadores israelíes en la reunión de hoy.