Los socialdemócratas plantean ofrecer un cuarto ministerio a Los Verdes

Los Verdes de Joschka Fischer, ministro de Asuntos Exteriores de Alemania, ha sido la formación mejor parada en las elecciones federales celebradas ayer y su carismático líder es consciente de ello después de que las urnas le brindasen el mejor resultado de su historia en unas elecciones federales. Por ello, Los Verdes se disponen a recoger alguna "recompensa" en la formación de una nueva coalición rojiverde, que ayer mismo Fischer se comprometió a reeditar.

De hecho, el SPD del canciller Schröder plantea ofrecer a Los Verdes un cuarto ministerio -ya ostentan el de Exteriores, el de Medioambiente, con Jürgen Trittin, y Agricultura y Protección del Consumidor, con Renate Künast-. Así lo ha confirmado esta mañana el secretario general del partido, Franz Müntefering.

No obstante, Fischer, tras dejarse ovacionar como un héroe, pasada la medianoche, en la sede del Partido Socialdemócrata (SPD), junto a Schroeder, ha comparecido hoy dispuesto a revelar poco de lo negociado en el primer contacto nocturno con el recién reelegido canciller. "Las negociaciones de coalición se harán en el clima de cooperación y voluntad común de mantenimiento de la coalición", ha dicho Fischer, "con la vista puesta en los contenidos, no en el mayor o menor número de ministerios".

El avance ecopaficista -obtuvieron el 8,6%, casi dos puntos más que en 1998- ha permitido a la coalición roji-verde defender su mayoría en el Parlamento. El SPD de Schroeder y los conservadoras de Edmund Stoiber empataron en 38,5 puntos.

Pero, antes de que nadie le preguntara acerca de sus aspiraciones como ministro y como vicecanciller, Fischer ha mencionado la importancia de la "política europea" en el proceso de ampliación hacia el Este. La alusión fue cazada al vuelo como una aspiración al cargo de responsable para Europa, a concretar aún si tendrá rango de ministro o de secretario de Estado, adscrito a Exteriores o a la Cancillería.

Fortalecido

En el otro lado de la contienda, el derrotado candidato conservador, Edmund Stoiber, ha asegurado que la Unión Cristianodemócrata y la Unión Socialcristiana de Baviera (CDU/CSU) han logrado cumplir con el objetivo de salir fortalecidas de las elecciones y "presentarse al mismo nivel que los socialdemócratas". Frente a los comicios de 1998, la CDU/CSU consiguió aumentar un 3,4%.

El jefe del gobierno bávaro ha asegurado que su partido, la CSU, hará todo lo posible por lograr que se mantenga la cohesión entre las dos formaciones hermanas y por que el éxito electoral sirva de base para otros éxitos en los próximos cuatro años. El jefe del grupo parlamentario de la CDU/CSU, Friedrich Merz, en cambio, ha hecho un balance menos optimista al reconocer que no habían alcanzado su principal objetivo, que era lograr un porcentaje mínimo del 40%.