La CIA podría haber asesorado en actividades de contrainsurgencia a militares mexicanos en la masacre ocurrida en la Plaza de las Tres Culturas, de la que se cumplen hoy 34 años, de acuerdo a los datos aportados en un documental elaborado por el grupo periodístico La Jornada.
La sociedad mexicana recuerda hoy la masacre cometida en la céntrica Plaza de Tlatelolco durante el mandato del entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz (1964-1970), fallecido el 15 de julio de 1979, y su secretario de Gobernación, Luis Echeverría, aún vivo. El 2 de octubre de aquel año, varios batallones de soldados y agentes vestidos de paisano atacaron una manifestación encabezada por estudiantes universitarios que reclamaban mejoras educativas y otros cambios políticos en el país.
El programa ahonda en las circunstancias que rodearon aquel ataque contra unas 8.000 personas congregadas en la plaza de Tlatelolco, que dejó un número incierto de víctimas mortales: 37 según las cifras oficiales y más de 400 según los supervivientes. El inédito documental, elaborado por Carlos Mendoza, investiga aquellos hechos y dedica un lugar destacado al testimonio del entonces ministro de Defensa, el general Marcelino García Barragán, fallecido en 1979, que salió a la luz pública en 1999.
El documental plantea que el general Luis Gutiérrez Oropesa fue el responsable de "permitir que asesores estadounidenses adiestraran a personal del Estado Mayor Presidencial durante el conflicto estudiantil y de ordenar que oficiales de este cuerpo desarrollaran actividades terroristas contra el estudiantado". El testimonio se completa con otro documento del Departamento de Defensa de EE UU que señala que Gutiérrez Oropesa "se había excedido en sus funciones" y "cambiado deliberadamente las órdenes" de su superior, el general Barragán, "durante los sucesos".
Apoyo de la Triple A
Los militares mexicanos estaban al corriente de quiénes eran los líderes estudiantiles pues habían infiltrado a sus agentes en el movimiento y contaban con apoyos de la inteligencia de otros países, como el del comisario argentino Héctor García Rey, que había sido jefe de la Alianza Argentina Anticomunista, la Triple A.
El documental añade declaraciones del presidente Díaz Ordaz, que en uno de sus testimonios sobre la masacre de Tlatelolco se mostró conforme con sus actuaciones pasadas pese a su crudeza. Díaz Ordaz dijo, por ejemplo, que durante sus años de Gobierno de lo que más orgulloso se sentía era de los sucesos del 68, que le permitieron "servir y salvar a este país".