La guerra de Irak parece tocar a su fin con la entrada de las tropas de la coalición hasta el corazón de Bagdad pero sigue ofreciendo imágenes terribles. Un atentado suicida ha matado a un marine y ha herido de gravedad a alguno más, según ha confirmado un oficial del cuerpo en Bagdad.
Además, un portavoz estadounidense ha informado de que podría haber fallecido más gente en el ataque, que ha tenido lugar en las cercanías del Hotel Palestine. Éste es el mismo lugar en el que hace días falleció el camarógrafo José Couso y se encuentra detrás de la plaza en la que ayer fue derribada la estatua de Sadam Husein.
Según testigos, el atentado fue llevado a cabo por un hombre que bajó de un taxi y se dirigió andando hacia un puesto de control estadounidense antes que se produjera una explosión. De acuerdo a los primeros informes, al menos otros tres soldados estadounidenses han resultado heridos de gravedad.
El suceso se ha producido en uno de los controles de carretera instalados por los soldados de EE UU donde prohíben el acceso de vehículos -precisamente para evitar ataques suicidas- y en los que se somete a los transeúntes a severos registros.
Un suceso más que viene a unirse a los que acontecen durante todo el día en las calles de la capital. Este mediodía un fotógrafo de la agencia France Press ha constatado que decenas de cadáveres yacen en las aceras o entre vehículos calcinados en el barrio Al Dora, al sur de la capital. No se sabe aún cómo se produjo la matanza, aunque puede ser el resultado de los enfrentamientos que aún salpican la capital entre los soldado de EE UU y focos de resistencia iraquí.
En las últimas horas las agencias de prensa han relatado enfrentamientos pero más bien en el oeste y el norte de Bagdad, donde, en las últimas horas, se han producido varios incidentes en los que han fallecido dos marines y dos civiles iraquíes. Estos enfrentamientos, junto a algunas explosiones y el continuo sobrevuelo de aviones, ha roto la calma en la ciudad, que ha vivido su primera noche tranquila desde el inicio de la guerra.
Duro combate
Los marines y las fuerzas de la Guardia Republicana han librado un duro combate junto a la mezquita de Adamiya, al parecer por la sospecha de que allí se pudiera ocultar Sadam Husein. En declaraciones a la CNN, el capitán Frank Thorp ha explicado que sus informaciones señalaban que en la mezquita había entrado "un grupo de la dirección del régimen", aunque no ha querido comentar la posibilidad de que estuviera el propio Sadam.
Mientras, grupos de iraquíes continúan asaltando almacenes y tiendas, incluso en los barrios donde se encuentran las tropas estadounidenses, que no han intervenido para poner fin al pillaje. De los saqueos no se ha librado ni la Embajada de Alemania ni el centro cultural francés. Además, al menos cinco ministerios situados en pleno centro de Bagdad son pasto de las llamas esta noche.