El primer ministro israelí, Ariel Sharon, ha invitado formalmente hoy al líder del partido laborista, Simon Peres, a iniciar lo más rápido posible las negociaciones para la entrada de su formación en el Gobierno, tras haber recibido el apoyo de la cúpula del Likud. Los palestinos esperan que la entrada de Peres en el Ejecutivo sirva para relanzar el proceso de paz.
Sharon ha telefoneado al número uno laborista después de que su partido, el Likud, le diera luz verde anoche para iniciar las negociaciones a fin de formar un Gobierno de coalición.
Este apoyo debería permitir a Sharon aplicar su plan de retirada de la franja de Gaza previsto para el año próximo ampliando su gobierno con el que no tenía ya una mayoría parlamentaria.
Esperanza para los palestinos
Los palestinos cuentan con que el próximo Gobierno de Ariel Sharon sirva para relanzar el proceso de paz con Israel, según ha indicado hoy el ministro palestino encargado de las negociaciones los israelíes, Saeb Erakat. "Esperamos que la formación de un nuevo Gobierno israelí conducirá al relanzamiento de un proceso de paz significativo que llevará al final de la ocupación israelí desde 1967 y a una solución en dos Estados", han sido las palabras de Erakat.
Por un 62% de los votos contra 38, el primer ministro convenció ayer al máximo órgano de su partido de la conveniencia de negociar con los laboristas, en una votación en la que participó el 75% de los más de 3.000 delegados del Likud. Sharón advirtió al Likud de que la otra alternativa sería convocar elecciones anticipadas, con las consecuencias que ello pudiera acarrear.
La decisión adoptada ayer por el Comité Central ordena también convocar a negociaciones a los partidos ultraortodoxos Shas y Judaísmo Unido de la Biblia.
Desde las elecciones de enero de 2003 el Comité Central del Likud se oponía a la incorporación del Partido Laborista al Gobierno encabezado por Sharón, y por ello los analistas locales ven su victoria de anoche como un paso importante para acometer la retirada de Gaza.