Casi cuatro semanas después del seísmo que provocó un gigantesco maremoto en el océano Índico siguen aumentando las cifras de la tragedia. Según el último balance hecho público hoy por las autoridades de Yakarta sólo en Indonesia han muerto 166.320 personas, con lo que el número total de fallecidos alcanza los 219.000, la población de un ciudad como Vitoria. El número de muertos supera ya el que provocó la explosión de las bombas atómicas en Hiroshima y Nagasaki (192.000 víctimas mortales en total).
El último balance de muertos en el país hablaba de 114.717 muertos, por lo que de golpe las autoridades indonesias han comunicado 50.000 nuevos fallecidos. De las víctimas mortales 166.320 corresponden a la provincia de Aceh, la más afectada, y 240 a Sumatra del Norte. En un dramático comunicado, el presidente del país, Susilo Bambang Yudhoyono, ha afirmado que quizá el número definitivo no se conozca nunca.
Según Haniff Asmara, responsable de la célula de crisis en Indonesia, la prioridad ahora es localizar a las víctimas. Asmara estima que se tardará cuatro semanas más en recuperar todos los cadáveres.
Los trabajadores humanitarios que trabajan en la zona han denunciado que excesiva centralización de la ayuda por parte de las fuerzas armadas y han alegado que la ayuda indonesia, compuesta casi exclusivamente por arroz, es incompleta e insuficiente, aunque reconocen que tampoco ellos están en condiciones de suministrar otra ayuda de momento.
En Sri Lanka, el segundo país más castigado por la tragedia, han perdido la vida 30.920 personas.