Miles de opositores al presidente venezolano Hugo Chávez han salido este sábado a las calles de la capital para protestar por las últimas medidas del Gobierno. De manera simultanea, al otro de la capital, los chavistas han acompañado a su presidente en otra marcha. Esta segunda manifestación fue televisada durante más de cinco minutos en todos los medios audiovisuales nacionales por orden del presidente, que arengó en directo para que "la gente" viera la concentración. Ambas fueron multitudinarias y técnicamente conmemoraban lo mismo: El aniversario del fin de la dictadura Marcos Pérez Jiménez hace 52 años.
Los opositores se quejan de la devaluación de la moneda, la expropiación de comercios o los cortes periódicos de energía eléctrica, según el Gobierno por la falta de agua en los embalses donde están las centrales hidroeléctricas. El alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, opositor a Chávez y uno de los líderes de la marcha, ha aprovechado la oportunidad para hacer un llamamiento a la unidad para las lejanas elecciones parlamentarias el 26 de septiembre. Un trabajador de la cadena de supermercados Éxito, expropiada por el Gobierno, manifestó su rechazo solicitando al "señor Presidente" que "construya y no expropie". La protesta ha acabado sin incidentes y el eslogan más repetido ha sido "Chávez tás ponchao", expresión que es béisbol significa quedar fuera de juego.
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Ambas marchas han contado con la seguridad de 5.560 funcionarios y se ha prohibido durante las mismas que los participantes fuesen armados o consumieran alcohol. No han ocurrido incidentes de importancia.