El Gernika ya puede navegar libremente por las aguas del Mediterráneo. La autoridad portuaria griega ha revisado esta mañana la documentación del navío español y lo ha dejado zarpar, después de haberlo retenido durante dos semanas cuando trataba de llegar a la franja de Gaza con 45 activistas a bordo. Los ocho miembros de la plataforma Rumbo a Gaza -seis en Atenas y dos en Madrid- han abandonado la huelga de hambre que comenzaron el pasado lunes en protesta por la retención de la embarcación y como medida de presión al Gobierno español para que intercediese ante el bloqueo heleno. Los activistas propalestinos también han finalizado la ocupación de la Embajada española de Atenas.
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La embarcación formaba parte de la decena de navíos que constituye la II Flotilla de la Libertad, que transportaba 5.000 toneladas de ayuda humanitaria a la franja de Gaza en una acción de solidaridad con el pueblo palestino y de protesta contra el bloqueo israelí al territorio. Las autoridades griegas retuvieron a todos los barcos alegando motivos de seguridad, por dirigirse a una zona conflictiva. Los activistas del Gernika habían recurrido a la ocupación de la Embajada española y a la huelga de hambre como medida de protesta y presión política.
En una conversación telefónica desde Atenas, Rafael Palacios, unos de los huelguistas, ha afirmado estar "muy contento" por el desenlace y ha asegurado no tener ninguna constancia de una intervención del Gobierno español en el asunto. Alejandro Fernández, portavoz de Rumbo a Gaza, ha añadido que durante las últimas dos semanas el Gobierno español no se ha puesto en contacto con los activistas.
Parte de los miembros de Rumbo a Gaza volverá mañana a España, mientras que el resto seguirá a bordo de la recién liberada embarcación. Aún no queda claro a dónde se dirigirá el Gernika. Según Rumbo a Gaza todavía no está decidido si el barco regresa a España o retoma el viaje a la franja. La plataforma está en contacto con la Flotilla de la Libertad para determinar el futuro próximo del navío.