Tres semanas después de que la multinacional estadounidense Baxter admitiese por primera vez que los filtros dializadores que fabrica pudiesen estar detrás de la muerte de 11 enfermos renales en Valencia, Madrid y Barcelona a finales de verano, y en los 21 fallecimientos en Croacia, la compañía ha anunciado hoy el cierre de dos plantas en Ronneby (Suecia) y Miami Lakes (EE UU), como consecuencia de la decisión de la empresa de cesar de forma permanente la fabricación de los dializadores A y AF.
Según el director general de Baxter en Suecia, Magnus Dehl, "la mayor responsabilidad de la compañía es actuar de forma inmediata para asegurar que sus productos cumplen con los más altos niveles de seguridad". Esta decisión afecta a 158 empleados en Ronneby y a 98 empleados en Miami Lakes.
Por otra parte, la compañía señala en un comunicado que seguirá evaluando si existen otras opciones, más allá de la fabricación de productos actuales de Baxter, que pudieran resultar en la utilización de estas plantas en el futuro.
Empleados y autoridades competentes han sido informados acerca de la decisión, y la compañía ha iniciado conversaciones con el sindicato para preparar los servicios de apoyo necesarios para sus empleados, ha añadido Baxter.
Baxter fabrica y comercializa productos para uso médico en más de 100 países en las áreas de biociencia, administración de medicamentos y terapia renal.