Los Mossos d'Esquadra han detenido en Girona a Manuel C., quien el pasado domingo quemó a su ex novia, S.S., de 17 años, tras rociarla con gasolina. La joven se encuentra en estado muy grave, con quemaduras en el 37% de su cuerpo, en la Unidad de Quemados del Hospital del Valle Hebrón de Barcelona, mientras que el hombre ha pasado esta mañana a disposición del juzgado de primera instancia e instrucción número 3 de Santa Coloma de Farners.
Los hechos sucedieron la noche del pasado domingo y Manuel C., de origen portugués, fue detenido poco después en el pantano de Susqueda, donde pasó dos horas subido a una de las barandillas del embalse amenazando con tirarse al vacío hasta que un psicólogo de los bomberos le convenció para que no lo hiciera, según han informado fuentes cercanas a la investigación.
La chica, S.S., vecina de Les Planes d'Hostoles, se encontraba la noche del domingo en el bar Can Collell de la localidad en compañía de unos amigos. La joven pidió a uno de sus amigos que la acompañara a casa porque, aunque vive muy cerca del bar, al parecer últimamente intentaba ir acompañada a todas partes por el temor que le infundía su ex novio, que no había aceptado la ruptura de su relación sentimental.
Cuando se encontraba en el interior del vehículo, Manuel apareció a bordo de otro coche y le pidió que se fuera con él, pero la joven se negó y el detenido, que llevaba una garrafa con gasolina, le roció la falda y le prendió fuego con un encendedor.
La chica logró salir del vehículo y atravesó corriendo y en llamas la carretera hasta el aparcamiento que se encuentra al otro lado de la vía, donde el conductor de un autocar de la compañía Teisa, que acababa de parar, logró apagarle el fuego con un extintor. Uno de los amigos de la chica sufrió también quemaduras en las manos al intentar apagar las llamas.
Intento de suicidio
Una enfermera, que se encontraba casualmente en el bar, atendió a la chica hasta la llegada de una ambulancia, que la trasladó inicialmente al Hospital Josep Trueta de Girona, desde donde fue luego conducida a la Unidad de Quemados del Hospital del Valle Hebrón de Barcelona. La joven tiene quemaduras profundas de segundo y de tercer grado en las extremidades inferiores, cara y cuello que le afectan el 37% del cuerpo, y, aunque su pronóstico es muy grave, evoluciona satisfactoriamente al tratamiento.
El agresor, que huyó inmediatamente después de los hechos en un coche, fue localizado por los Mossos d'Esquadra tras recibir una llamada de uno de sus familiares, que alertaba de que el Manuel C. se encontraba en el pantano de Susqueda.
Los agentes encontraron al hombre subido en una de las barandillas del pantano, desde donde amenazaba con tirarse al vacío y donde permaneció durante unas dos horas, hasta que un psicólogo de los bomberos le convenció para que bajara.