El científico sueco Torgny Svensson ha asegurado esta mañana en Santander que la vacuna contra la adicción a la nicotina estará en el mercado en un plazo de entre tres y cinco años. Svensson, que participa en el congreso sobre las formas de combatir la adicción al tabaco organizado por la Sociedad para la Investigación sobre la Nicotina y el Tabaco, ha explicado la marcha del trabajo que desarrolla para encontrar una vacuna contra la adicción a la nicotina, que, en la actualidad, se experimenta en un grupo de 70 voluntarios en Bruselas.
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Según el investigador, miembro del Instituto Carolinska de Estocolmo, esta vacuna -que estimula las defensas del cuerpo para que reconozca la nicotina en la sangre e impida que alcance el cerebro y provoque dependencia- no tiene efectos secundarios "de gran envergadura" sino sólo las reacciones locales producidas al inyectarse de forma subcutánea.
"No se puede decir que la persona a la que se aplique la vacuna no tendrá deseos de fumar", ha señalado Svensson, aunque ha precisado que si el individuo intenta fumar no obtendrá satisfacción, por lo que se espera que sirva para prevenir recaídas en este hábito.
Proteger el feto
Este método de inmunización, que se utilizaría igual que cualquier otra vacuna con una primera aplicación y posteriores dosis de recuerdo, serviría, además, para ayudar a proteger al feto en las mujeres embarazadas y fumadoras.
Svensson ha afirmado que, según los primeros estudios clínicos realizados, se ha podido comprobar que la vacuna es segura y bien tolerada por el individuo. ha explicado, además, que en animales crea altos índices de anticuerpos y que en los estudios preliminares en seres humanos se ha visto que los hay en cuanto a la formación de nicotina en el cerebro.