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El presunto pederasta de Huelva obligaba a sus hijas a imitar las películas pornográficas

Los abusos se producían en zonas despobladas o en el domicilio familiar si la madre de los pequeños se ausentaba

El presunto pederasta detenido en Huelva por abusos a varios menores, entre ellos dos de sus hijas, mostraba películas pornográficas a los pequeños. Después les amenazaba con un cuchillo para que hicieran lo mismo que habían visto, según ha informado hoy la Subdelegación del Gobierno.

F.B.A., de 34 años, fue denunciado inicialmente por su esposa por malos tratos pero en el transcurso de la instrucción de las diligencias policiales, los agentes sospecharon que los hijos podían ser víctimas de abusos sexuales.

La hija mayor le defiende

En su denuncia, la mujer, I.P., ha manifestado que hace nueve años su esposo había mantenido relaciones sexuales con una prima que entonces tenía ocho años. Hizo constar además que, al parecer, una hija de un anterior matrimonio, de trece años, había manifestado en ocasiones que su padre había pretendido tener relaciones sexuales con ella. Aunque la hija mayor del detenido defendió ayer a su padre de las acusaciones y acudió a los juzgados de la capital onubense para testificar a su favor. La adolescente aclaró que no había interpuesto denuncia alguna contra él. "Mi padre nunca me ha tocado, y antes de abusar de una niña pequeña abusaría de mí, que soy mayor", ha señalado esta menor.

Tras diversas conversaciones con la madre y otras indagaciones, la Policía ha podido saber que en el domicilio vivían las dos hijas de la pareja, de nueve y diez años, y una sobrina de ocho. En sus declaraciones manifestaron haber sido víctimas de agresiones sexuales. Estos abusos se habrían producido unas veces en zonas despobladas, donde F.B.A. las llevaba en su coche y otras en el domicilio familiar, principalmente los fines de semana, aprovechando la ausencia de la madre, que salía a trabajar.

En el desarrollo de la investigación ha sido intervenido numeroso material informático para su estudio y dos cuchillos que supuestamente utilizaba para realizar sus amenazas. El hombre, tras prestar declaración en relación a los hechos, con asistencia de una letrada, ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial, que ha decretado su ingreso en prisión.