El Pontificio Consejo para los Agentes Sanitarios del Vaticano ha publicado el mensaje con ocasión del Día Mundial contra el Sida en el que destaca que es "fundamental la formación y educación de todos" para promover "un estilo de vida que privilegie la abstinencia, la fidelidad conyugal y el rechazo a la promiscuidad sexual" para luchar contra el virus del Sida.
El dicasterio ha subrayado que este Día Mundial contra el Sida debe ser una ocasión para promover "la educación a estilos de vida que comprendan también un acercamiento correcto y responsable a la sexualidad" y "el acceso universal a las terapias por parte de los contagiados".
El Vaticano ha recordado que el Papa, en la Exhortación Apostólica Africae Munus, subrayó que la formación de las nuevas generaciones en la abstinencia "forma parte de la cuestión del 'desarrollo integral' a la cual tienen derecho las personas y las comunidades".
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Terapias adecuadas
Por otra parte, el Pontificio Consejo para los Agentes Sanitarios del Vaticano ha destacado que, "a pesar de que la comunidad internacional ha comenzado a comprometerse contra la infección hace más de 20 años", todavía "se estima que 1.800.000 personas mueren hoy a causa del virus".
Según ha precisado el dicasterio, estas personas "podrían llevar una vida normal, si tan sólo habrían tenido acceso a las terapias farmacológicas adecuadas". El Vaticano ha declarado que estas muertes "no son justificables" al igual "que el dolor de sus familias, la pobreza de sus núcleos familiares, el crecimiento de su marginación y la angustia de los niños huérfanos". Asimismo, ha señalado que también es "injustificable" la transmisión del virus "de la madre al niño, muchas veces víctima antes de comenzar a ver el mundo que le rodea".