El Gobierno balear destituyó ayer al director general de Consumo, Bartormeu Seguí, por su actuación en el control de las gasolineras del archipiélago. El Ejecutivo no ha sancionado al propietario de cinco surtidores de Palma que cometieron supuesto fraude, porque -señaló el conseller de Sanidad y Consumo, Francesc Fiol- no está clara la legislación.
La información oficial indica que la destitución fue presentada el pasado lunes como dimisión y destaca como causa que la investigación sobre las gasolineras "no se ha llevado a cabo con la eficacia necesaria".
Por otra parte, el director general de Comercio y Consumo de la Comunidad de Madrid, Ignacio de la Vega, indicó ayer que la Dirección General de Industria ha inspeccionado ya 250 estaciones de servicio madrileñas, de las cerca de 400 existentes, y terminará de hacerlo "en un plazo máximo de dos semanas". Consumo ha abierto hasta hoy 45 expedientes sancionadores, de los que siete de ellos, relativos a seis gasolineras -todas de la familia Villanueva-, han sido remitidos al juzgado.
Ayer, la empresa petrolífera Petrogal Española anunció que se ha personado en la defensa de su marca "en todos los expedientes abiertos con motivo del cierre de las estaciones de servicio" de su propiedad y explotadas por el Grupo Villanueva".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 5 de febrero de 1998