Tras la euforia y el triunfalismo que se respiró en la sede de IC-V a lo largo de la noche electoral por la victoria de las izquierdas en número de votos, ayer la formación ecosocialista optó por la autocrítica. En realidad, sin embargo, los reproches del líder de IC-V, Rafael Ribó, no iban dirigidos a su formación, sino a la de Pasqual Maragall, y en concreto a los capitanes socialistas, a los que reprochó el no haber permitido en Barcelona una coalición con la formación ecosocialista como la que se constituyó en las circunscripciones de Girona, Tarragona y Lleida. "Si se hubiera hecho coalición en todas las circunscripciones de Cataluña, ahora [sin el escrutinio definitivo] ya podríamos hablar de una mayoría de gobierno de izquierdas", lamentó el cabeza de lista ecosocialista.Aunque Ribó habló de "un error por parte de todos", el mensaje iba indiscutiblemente dirigido a la cúpula dirigente socialista. A la formación PSC-Ciutadanas pel Canvi, Ribó le dirigió ayer otra advertencia: "Si puede reclamar ser la formación más votada es porque suma los votos de IC-V en tres circunscripciones". El líder ecosocialista reiteró que la suma de fuerzas ensayada en Girona, Tarragona y LLeida ha funcionado y reclamó fórmulas similares en el resto de España en las próximas elecciones generales para favorecer una subida de la izquierda.
MÁS INFORMACIÓN
- Los socialistas crecen a costa de ERC y del PP
- Pujol muestra su solidez y el PSC no avanza
- Los nacionalistas no logran evitar que su dominio sea cada vez menor
- Maragall propone la formación de un Gobierno cuatripartito que excluiría a los populares
- CiU se inclina por gobernar en solitario con un mayor protagonismo de Unió Democràtica
- Por un escaño
- Aviso para nacionalistas y populares
- De Cataluña vengo
- El PP ratifica a Fernández Díaz y aplaza el debate sobre su liderazgo
- ERC anuncia que estará en la oposición y emplaza a Pujol a reunirse con Maragall
- Almunia pronostica que CiU perderá su papel protagonista en la política nacional
- El Gobierno cree que Pujol moderará su nacionalismo tras su mínima victoria
- El entorno industrial de Barcelona recupera su tradición de 'cinturón rojo'
Pese a reconocer que Jordi Pujol tiene casi todos los puntos para ser reelegido presidente de la Generalitat, Ribó señaló que a partir de estas elecciones ya nada va a ser como la anterior legislatura y reclamó al resto de fuerzas que han obtenido representación parlamentaria un "pacto de pluralismo", como el que sellaron en 1995 los grupos PSC, PP, ERC e IC-V y que permitió dar la presidencia del Parlamento catalán al socialista Joan Reventós. El pacto garantizaría que los órganos del Parlamento regional, su presidencia y los organismos que de ella se derivan respeten "la composición tan heterogénea que tendrá la nueva cámara catalana y la diferencia de criterios que ha existido sobre el voto de la ciudadanía y la atribución de escaños".
Advertencias a Pujol
En su reflexión del día después de las elecciones, Ribó también aludió al proceso de negociación sobre posibles alianzas. El líder de IC-V tachó de "inaceptable" que Jordi Pujol gobierne en solitario hasta el mes de marzo, coincidiendo con las elecciones generales. Si CiU lo hace, consideró Ribó, representará una "prueba de la sucursalización" de la política catalana "que ellos [CiU] consideran tan horrorosa". También alertó que un gobierno en solitario de CiU sumiría al Parlamento catalán en "seis meses de inestabilidad". Ribó advirtió asismismo al líder nacionalista de que si pacta con el PP cometerá una "vulneración flagrante de sus promesas electorales".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 19 de octubre de 1999