Un estudio realizado entre 5.000 jóvenes de entre 12 y 18 años de 36 colegios e institutos públicos de la Comunidad de Madrid indica que la vida sedentaria fomenta la aparición de trastornos mentales. Las conductas agresivas, las anorexias y los comportamientos retraídos o antisociales están, según los expertos que han llevado a a cabo esta investigación, directamente relacionados con la falta de una actividad de ocio al aire libre. Las chicas, que hacen menos deporte que los chicos, presentan un índice de salud mental medio un 10% peor que el de los chavales.
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Una investigación dirigida por Fernando Sánchez Bañuelos, actual decano de la Facultad de Ciencias del Deporte de la Universidad de Castilla-La Mancha y durante muchos años miembro de la Asociación de Deportistas Olímpicos (ADO), demuestra que a mayor sedentarismo entre los adolescentes hay más posibilidades de que aparezcan de manera imprevista comportamientos agresivos, antisociales y, en el caso de las chicas, anorexias.Durante seis años, el equipo de Sánchez Bañuelos ha realizado, con el apoyo económico del Comité Olímpico Español (COE), pruebas de comportamiento a jóvenes de 36 institutos y colegios públicos de la Comunidad de Madrid situados en el casco urbano, periferia y zona rural. Las preguntas se han basado en el test del psiquiatra británico Goldberg, pero adecuándolas a la edad de los chavales, de entre 12 y 18 años.
Los resultados más relevantes de esta investigación son elocuentes. Los chicos que practican actividad física en su tiempo libre manifiestan un mejor estado de salud psicológica o equilibrio mental. En consecuencia, aquellos que manifiestan realizar una práctica regular de la actividad física en su tiempo libre tienen un índice de salud mental un 10% mejor que quienes lo hacen de forma solamente ocasional.
También se observa mediante estas pruebas que los jóvenes con peor condición física manifiestan un índice de salud mental un 18% más desfavorable.
Más fumadoras
Las mujeres declaran una menor tasa de práctica de la actividad física en relación con los hombres -38% frente a un 68%-. A ello se debe que las chicas a esta edad manifiesten un índice de salud mental un 10% peor que los chavales. También entre ellas se da una mayor tasa de fumadoras -un 34,7% frente al 19,5%-.
Una parte de este estudio realizado entre adolescentes se centró en chicas que cursan ESO, con edades entre 12 y 17 años. De las 3.628 encuestadas, se detectó una pérdida creciente, con la edad, de la práctica deportiva, lo que, en opinión del equipo de Bañuelos, puede propiciar la aparición de la anorexia. El estudio de los especialistas avanzará en el futuro sobre este punto.
"La aparición repentina de comportamientos sociales reprobables a estas edades", concluye Bañuelos, "está directamente relacionada con la ausencia de una actividad física. Esta problemática se pone más de relieve cuando surgen casos extremos como el parricidio ocurrido hace tres semanas en Murcia , presuntamente perpetrado por un adolescente con perfil propio de pérdida de equilibrio mental, pero sin síntomas previos de enfermedad declarada".
Bañuelos advierte que es necesaria "una concienciación de los padres" para fomentar en sus hijos la práctica de actividades físicas. "No sólo por los beneficios que de ella se puedan derivar, sino también por evitar los perjuicios que su ausencia pueda ocasionar en el desarrollo y las graves consecuencias que pueden provocar. Un niño sedentario, que se pasa el día delante de un ordenador, tiene más posibilidades de padecer desequilibrios mentales. Físicamente estará peor y también será un crío más aislado", dice. El estudio sobre la influencia de la actividad física en el estado de equilibrio psíquico concluye: "Mediante una práctica de la actividad física adecuada se puede incrementar significativamente el estado de salud de la persona, no solamente respecto a la prevención de enfermedades, sino a un aumento de su equilibrio psicológico, su estado general de bienestar y su sensación de satisfacción con la vida".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 20 de abril de 2000