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El Gobierno quiere atraer 225.000 millones del sector privado para su plan de I+D

El plan de ciencia, tecnología e innovación aprobado el martes por el Gobierno vasco, para el que prevé destinar 102.145,2 millones de pesetas (613,9 millones de euros) de sus presupuestos durante este cuatrienio, se sustentará principalmente en el esfuerzo inversor que realizará el sector privado, que en el mismo periodo inyectará otros 225.348,5 millones de pesetas, según los cálculos del Ejecutivo autonómico. Este plan pretende alcanzar en 2004 una inversión en investigación y desarrollo (I+D) equivalente al 1,7% del PIB vasco y situarse así en los mismos parámetros que la media europea.

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, presidió ayer en el Kursaal donostiarra el acto de presentación de un plan que describió como un 'desafío ambicioso e ilusionante'. Se trata de crear un 'sistema de innovación vasco' que aglutine a los agentes científicos, educativos, empresariales y sociales de Euskadi más activos en el ámbito científico-tecnológico.

Ibarretxe habló de la 'necesidad de crecer' de forma 'equilibrada' hasta colocar a Euskadi entre los países europeos más avanzados, para lo cual se debe perfeccionar la 'incipiente' red de ciencia y tecnología. Recordó que 'hace 15 años' el País Vasco no llegaba al 70% de la renta per cápita media europea y en la actualidad ya se ha superado. Ibarretxe pidió 'flexibilidad' a los trabajadores y a las empresas para progresar y adaptarse a los 'nuevos cambios'.El consejero de Industria, Josu Jon Imaz, desgranó los principales ejes del plan de ciencia, tecnología e innovación 2001-2004, para el que se movilizarán entre todos los conceptos 368.578,7 millones de pesetas (2.215,2 millones de euros) en los próximos cuatro años. Además de la aportación del Gobierno vasco y del sector privado, el Ejecutivo central pondrá en marcha 156,6 millones de pesetas (el 7%) y de la UE provendrán otros 90,3 millones (4%).

El plan, aprobado por el Gobierno seis días antes de la convocatoria electoral, tendrá un 'impacto directo' en la generación de 1.600 nuevos empleos, afirmó Imaz, además de otros 125 puestos de trabajo en I+D en centros de investigación estratégica. También impulsará la creación de 160 empresas de base tecnológica, de las cuales la mitad operará en el sector de las tecnologías de la información y las comunicaciones. Para este objetivo el Ejecutivo ha reservado 20,41 millones de euros.

Este proyecto contará con la participación de unas 2.000 pequeñas y medianas empresas (pymes) y permitirá la formación de 200 investigadores y se generarán 200 nuevos productos comerciazables fruto de los estudios científicos. Uno de los objetivos consiste en alcanzar en 2004 un ratio de cinco investigadores por cada mil trabajadores vascos. También se pretende que las empresas dediquen el 3% de su volumen de negocio a la innovación (actualmente destinan el 2,22%).

El empleo

Entre las medidas concretas que tiene previsto llevar adelante el Gobierno vasco se encuentra el 'apoyo a los grupos de excelencia', dijo Imaz, para favorecer la estancia de investigadores que despuntan en centros de investigación extranjeros. También se impulsará la investigación orientada a la nanotecnología, microtecnologías o los materiales inteligentes, entre otros.

Ibarretxe aprovechó la presencia de un millar de asistentes a este acto para afirmar que es 'injusto' que desde algunas instancias, en alusión al Gobierno central, 'se hable de Estatuto al mismo tiempo que se imposibilita su desarrollo' para promocionar y apoyar la investigación en ciencia y tecnología, una competencia que está compartida por los ejecutivos de Madrid y de Vitoria. No obstante, apostilló que 'no vale de nada lamentarse ahora de esto ni de nada'.

El lehendakari empleó la imagen del retrovisor del coche para enfatizar la necesidad de 'mirar hacia atrás y seguir avanzando': 'Hace 15 años se puso de moda el plan de reconvertir y bien morir; en los 90 se llegó a la fase de la inversión y la internacionalización; ahora estamos en la etapa de la innovación', afirmó.

La convergencia con Europa -pasar del 1,2% al 1,7% del PIB en I+D-, opinó Ibarretxe, tiene que ir pareja a una reducción de la tasa de desempleo, actualmente en el 12%. 'Tenemos que trabajar más en esta dirección', dijo.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de marzo de 2001