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Los talibán lanzan la 'yihad' de Bin Laden

Los bombardeos han dejado 76 muertos y un centenar de heridos, según el régimen de Kabul

Los habitantes de Kabul se quedaron anoche sin luz. EE UU les bombardeaba por cuarta noche consecutiva. No obstante, los talibán se mantenían firmes. Su líder pidió a los musulmanes de todo el mundo que apoyen a Afganistán y se manifiesten contra Estados Unidos. Incluso han levantado las restricciones de comunicación que pesaban sobre Osama Bin Laden. "Es mentira que hayan destruido nuestras defensas aéreas", había asegurado horas antes Abdul Salam Zaif, su embajador en Pakistán. "Todos los musulmanes deben manifestarse contra EE UU y hacer lo que puedan contra su hegemonía", declaró el mulá Omar en una entrevista concedida al servicio en pastún de la cadena británica BBC.

El líder talibán pidió a los musulmanes de todo el mundo que se echen a la calle, un llamamiento que preocupa en el vecino Pakistán y otros países islámicos de la región como Indonesia, donde se han producido numerosas manifestaciones contra los bombardeos norteamericanos. Aun así, numerosos expertos consideraban esta madrugada que no se trataba de una convocatoria formal a la yihad.

A la hora en que se conoció la declaración, se oían fuertes explosiones al oeste de Kabul, cerca de los distritos de Rishkore y Kargah. Según informaciones difundidas estos días, Bin Laden tendría varios campos de entrenamiento en esas zonas. De madrugada, el aeropuerto de Kabul volvió a ser objetivo de nuevos bombardeos, que fueron especialmente intensos.

"Con el inicio de los ataques norteamericanos, las restricciones sobre Osama han dejado de aplicarse", dijo Abdul Hai Mutmaen, portavoz del jeque Omar, a un informador de la BBC. Mutmaen fue incluso más lejos al afirmar que el saudí al que Washington responsabiliza de los atentados del 11 de septiembre es ahora libre para llevar a cabo la yihad (guerra santa) contra Estados Unidos.

La noticia corrió como la pólvora. La noche anterior, un portavoz de Al Qaeda, la organización que dirige Bin Laden, había advertido que "los norteamericanos pueden esperar una repetición de los ataques de septiembre". "En el mundo [musulmán] hay miles de jóvenes que aman la muerte tanto como los estadounidenses la vida", declaró Suleimán Abu Ghaith en un mensaje grabado que difundió la cadena árabe Al Yazira.

Emitir declaraciones

Sin embargo, el ministro de Educación, Amir Khan Muttaqui, un portavoz habitual del Gobierno de los talibán, limitó el alcance de la medida. "Sólo permitimos que Osama emita declaraciones, pero mantenemos la prohibición de que use el suelo afgano para actos contra cualquier otro país", manifestó Muttaqui a la agencia Afghan Islamic Press (AIP), cercana a los talibán.

A preguntas de los informadores, el embajador Zaif dijo desconocer la medida. "En tanto que Estados Unidos esté derramando sangre de afganos, no será beneficioso para los norteamericanos", declaró, no obstante, antes de añadir que "si Estados Unidos continúa sus ataques sobre Afganistán, tampoco podrán estar seguros". Zaif aseguró que la noche anterior un misil había caído en una zona residencial al este de Kabul y que ya había decenas de víctimas mortales, aunque no pudo precisar el número. La AIP dijo que iban 76 muertos y un centenar de heridos.

El único embajador que los talibán tienen en el mundo cumplió con su ritual diario de condenar los bombardeos y denunciar que "Estados Unidos quiere reemplazar un Gobierno establecido con el antiguo rey". "El jeque Omar y Osama están sanos y salvos", reiteró también Zaif, que aprovechó para agradecer las muestras de solidaridad del mundo islámico y otros.

"La pretensión del señor Bush de que han destruido las capacidades defensivas del Emirato Islámico de Afganistán no es cierta", dijo el embajador. "Sus aviones vuelan muy alto y quedan fuera de nuestro alcance, ya que no tenemos sistemas tan modernos y sofisticados". Zaif también desestimó como propaganda las noticias de deserciones.

Asimismo, los talibán informaron ayer de que el periodista francés detenido el día anterior va a ser juzgado por espionaje. "Hemos advertido a todos los periodistas de que cualquiera que entre ilegalmente en Afganistán será tratado como un soldado estadounidense", dijo un portavoz. Michel Peyrard, de la revista Paris Match, que entró en territorio afgano cubierto con un burka, tiene 44 años.

Choques en la frontera

[Por otra parte, el martes pasado tropas paquistaníes libraron un combate de dos horas contra soldados talibán cerca de la frontera con Afganistán, según The New York Times. Los enfrentamientos acentuaron las presiones sobre el presidente paquistaní, el general Pervez Musharraf, quien hasta ahora ha intentado retener las protestas en favor de los talibán en todo el país.

Según oficiales de los servicios secretos paquistaníes, las escaramuzas se produjeron cuando por segunda vez en 48 horas fuerzas talibán entraron en Pakistán, aparentemente para huir de los bombardeos contra Afganistán. Los mismos funcionarios relataron que el pasado domingo, poco después de que empezaran los ataques, cinco helicópteros militares talibán alcanzaron una remota franja del lado paquistaní de la frontera buscando asilo de los bombardeos.

Los combates a lo largo de los 1.400 kilómetros de frontera que separa los dos países constituyen una reacción secundaria dentro del conflicto más amplio que se ha desarrollado en estos tres días de bombardeos. Sin embargo, los enfrentamientos han evidenciado los riesgos que Musharraf está enfrentando, así como las razones que empujaron al general a apelar a EE UU para la campaña aérea sea lo más corta posible.

Otra clara señal de las presiones sobre Musharraf fue la invitación del martes la segunda en una semana al primer ministro indio a acudir a Islamabad para discutir sobre el conflicto en la región de Cachemira, ocupada por Pakistán].

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 11 de octubre de 2001