El portavoz parlamentario del PSOE, Jesús Caldera, anunció ayer que su grupo pedirá la dimisión del gobernador del Banco de España, Jaime Caruana, en una de sus propuestas como conclusión de la comisión de investigación del escándalo financiero de Gescartera.
El PSOE argumenta que Caruana debe dimitir por las 138 cuentas cifradas que, según anunció el gobernador del Banco de España el pasado viernes en sesión secreta en la Comisión Gescartera, mantiene el HSBC en España.
Caruana explicó el viernes que creía que esas cuentas son legales, aunque a él "no le gustaban", según la versión de su declaración que han ofrecido varios de los diputados que asistieron a esa parte de la comisión que, por expreso deseo del gobernador, se desarrolló sin presencia de periodistas.
Caruana calificó de "pintorescas, curiosas y preocupantes" las cuentas cifradas, según los diputados que le escucharon. Y el lunes, el vicepresidente Rato anunció que iba a pedir una investigación al Banco de España para ver si se ajustan a la legalidad.
Con esta "contradicción", el portavoz socialista Jesús Caldera montó ayer su argumento: "Si Rato considera que esas cuentas son ilegales, y me parece bien esa consideración, tendrá que investigarlo, pero yo además exijo responsabilidades".
Eludir a Hacienda
Caldera aseguró que no entendía que el gobernador del Banco de España, "un técnico en la materia, dijera en el Congreso que eso era legal". Porque si es legal, a juicio del PSOE, eso "significaría que puede haber depósitos de ciudadanos españoles en cuentas bancarias sin que lo sepa la Hacienda Pública". Y eso, añadió Caldera, es "peor aún" por lo que significa de trato desigual para la mayor parte de los ciudadanos que "no tiene forma de eludir sus obligaciones con la Hacienda Pública".
El PSOE está "convencido" de que las cuentas cifradas del HSBC "no pueden ser otra cosa que ilegales". Con esa hipótesis, el gobernador "habría incurrido en una negligencia" porque "tenía conocimiento de esos hechos y no los combatió".
El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, consideró "muy grave" la revelación sobre la existencia de cuentas cifradas en el HSBC en España. El diputado socialista Antonio Cuevas, portavoz en la comisión Gescartera, llegó a denunciar que el Banco de España permitió la existencia de "un paraíso fiscal en el centro de Madrid".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 31 de octubre de 2001