El Valencia se dejó de zarandajas y firmó anoche su pase a la siguiente ronda de la UEFA, objetivo que no cumplieron el Celta y el Zaragoza, eliminados. El conjunto de Rafa Benítez, que empató en Varsovia, sentenció la eliminatoria ante el Legia en un cuarto de hora. A los 15 minutos, Albelda e Ilie ya habían destrozado al Legia, que nada tuvo que ver con el pegajoso e incluso atrevido equipo que se le atragantó al Valencia en Varsovia. Nada de eso. El Legia asistió impotente al monólogo del Valencia durante el primer tiempo, que finalizó con un contundente resultado: 4-0. Ya son 31 los partidos que el Valencia lleva invicto en Mestalla en competiciones europeas.
El Valencia desarboló al Legia con combinaciones al primer toque y paredes a espuertas. El dispositivo defensivo del conjunto polaco se hizo añicos muy pronto, en cuanto el Valencia decidió rematar la faena. Emulando al mejor Mendieta, Albelda firmó el primer gol con una fortísima volea que confirmó la progresión como jugador del duro centrocampista del Valencia. Ahí se borró el Legia, un espectador más en el festín que se dio el grupo valencianista durante el primer tiempo.
La incapacidad del Legia para armar algo de juego mostró lo mejor del Valencia. Mostró por ejemplo a un Aimar que se movió con soltura como enlace, surtiendo de balones a los delanteros, como ocurrió en el segundo gol, marcado por Ilie tras un pase del centrocampista argentino. Aimar acudió acá y acullá, en auxilio de los interiores, siempre desmarcado. El argentino fue uno de los protagonistas de un partido resuelto en un plis plas.
Los goles de Djukic, Aimar de penalti, Sánchez y Angulo, estos dos últimos ya en el segundo tiempo, adornaron un partido desigual en el que el Legia defraudó, permitiendo que el Valencia campara a sus anchas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 2 de noviembre de 2001