El debate sobre las 607 enmiendas a la Ley Orgánica de Universidades (LOU), presentadas por prácticamente todos los grupos políticos, y los seis vetos a la totalidad de la ley empezó ayer con un ambiente tenso entre los grupos de la oposición y el PP. El senador del PP José María Barahona dijo en la sesión de ayer que "los estudiantes están en la calle enturbiando y crispando el debate" del Senado. Y añadió: "Existen grupos políticos que no solamente animan, no solamente organizan, sino también patrocinan y financian".
En respuesta a este comentario, el portavoz de Educación socialista en el Senado, Manuel Fernández Zanca, tachó de "intolerable que el PP haga esas afirmaciones y acuse a los estudiantes de ser manipulados". Fernández Zanca argumentó que, "salvo contadísimas excepciones, todo el mundo ha coincidido en que las manifestaciones que se han producido a lo largo y ancho de España han sido ejemplares". Fernández Zanca calificó de "ofensivo" que el PP "dude de que los estudiantes piensen por su cuenta al decir que están patrocinados por grupos políticos, porque muchos estudiantes conocen la ley y por eso se oponen a ella".
La Comisión de Educación del Senado ha dispuesto sólo de dos días (ayer y hoy) para discutir la ley. Los socialistas aseguran que se está produciendo en la Cámara alta un "monólogo y ningún debate" .
Por otra parte, un grupo de profesores de la Universidad de Santiago de Compostela entregó ayer al secretario de Estado de Universidades, Julio Iglesias de Ussel, un manifiesto en contra de la LOU firmado por más de 900 profesores. La Asamblea de Estudiantes, Profesores y PAS de las tres universidades gallegas señaló ayer, respecto a la manifestación del pasado miércoles, que quiere evitar el "dirigismo" de cualquier tipo de asociación y aseguró que fue ella la que sacó en Santiago a la mayoría de los estudiantes a la calle.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 30 de noviembre de 2001