El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Valladolid, José Alberto Rodríguez Carretero, ha ordenado la retirada de todas las antenas de telefonía situadas en un edificio cercano al colegio público García Quintana, al considerar que pueden poner en peligro la salud y, además, al detectar indicios de delito en la concesión municipal para autorizar su instalación. La evidencia científica aceptada actualmente no demuestra riesgos para la salud en estas instalaciones.
El juez había desestimado el 24 de octubre, y en autos posteriores, la retirada cautelar de las antenas, contrariamente a lo solicitado por la acusación particular y la Fiscalía de Valladolid, que había presentado denuncia el 18 de octubre para que el juzgador investigara una presunta relación entre dichas instalaciones y media decena de casos de cáncer detectados en el García Quintana y otros centros escolares de la zona. Pero el nuevo auto da un plazo de siete días a las empresas para que corten la actividad y, antes de tres meses, desmonten el material. El juez reconoce que no se puede establecer relación causa-efecto entre las instalaciones y tres casos de cáncer detectados en el García Quintana.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 22 de diciembre de 2001