La Asociación de Músicos de Leganés Amigos del Ruido denunció ayer las condiciones en las que ensayan los grupos de la localidad con escasos recursos económicos y consideró que la muerte de los cinco jóvenes 'es consecuencia de la dejadez y discriminación de la política cultural del Ayuntamiento'.
En un comunicado enviado a Efe, esta asociación lamenta el fallecimiento de los componentes de una banda en el incendio de una nave que utilizaban para ensayar, y recuerda: 'Hemos estado insistiendo, año tras año, concierto tras concierto, evento tras evento, en la necesidad de que nuestro pueblo tenía que habilitar locales de ensayo dignos para albergar el amplio movimiento musical'. Aseguran haber hecho llegar informes y documentación en vídeo 'de cómo y en qué condiciones' ensayaban algunos grupos, 'sin apenas medios económicos, con unas condiciones higiénicas y de seguridad totalmente insuficientes'.
'Locales donde se pasa frío en invierno y verdadero calor en verano', 'que más parecen chabolas, pero que por la proximidad al pueblo y por tener cuatro enchufes en las paredes suelen bastar', agregan. A juicio de esta asociación, 'las muertes de estos compañeros son consecuencia de la discriminación de la política cultural del Ayuntamiento, que prima a casas regionales y otros colectivos que engrosan sus posibles votantes'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 30 de diciembre de 2001