Es curioso que sea en este momento, cuando parecía que CiU, poco a poco, queria ir distanciándose del PP, cuando el presidente del Gobierno español hace la propuesta a Jordi Pujol de formar parte de su Gobierno; ¡le ofrece 'sólo' cuatro ministerios, casi nada!
Probablemente este distanciamiento que CiU proclama sea sólo una estrategia mediática y electoral al ver que las cosas no salen como les gustaría: cambio de líder, desgaste del proyecto, cansancio general entre el electorado y muchísimos fallos en todo el territorio catalán. Desgraciadamente, a pesar de las distancias ideológicas en cuanto a la concepción del Estado, CiU ha estado durante estos seis últimos años esencialmente de acuerdo con el PP, a pesar de querer convencer a la ciudadanía de lo contrario.
Quizá esta oferta sea también una estrategia mediática y electoral del PP: Aznar, convencido de que Pujol no aceptará, le hace esta propuesta para demostrar y evidenciar su negativa y así poder captar los votos de los convergentes partidarios de que CiU entre en el Gobierno español. Cuando le convenga, Aznar sacará su carta de la manga y utilizará esta negativa en favor suyo.
Quizá, todos quieren convencernos, cada uno desde su punto de vista y desde sus intereses, de que con CiU en el Gobierno de Madrid se haría otro tipo de política y que Cataluña ganaría en autonomía... Creo que a esta propuesta pocos le darán crédito ya que es el mensaje con el que CiU empezó su primer pacto con el PP y ya hemos visto que de ganar, poca cosa se ha ganado, si es que hemos ganado alguna.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de enero de 2002