El canciller alemán Gerhard Schröder se propone demostrar ante tribunales que no se tiñe el pelo amparado en dos testigos: el peluquero que le atiende en Berlín, Udo Walz, y el que lo hace en su ciudad de residencia, Hannover, Stephan Krause. El jefe del Gobierno contará con sus testimonios profesionales en el juicio que se abrirá el 12 de abril, en Hamburgo, contra la agencia de noticias ddp. Schröder presentó una demanda contra ese medio, que difundió declaraciones de una asesora de imagen, para quien el político oculta sus canas con la cosmética.-
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de marzo de 2002