El ministro de Asuntos Exteriores marroquí, Mohamed Benaissa, declaró ayer que es aún 'prematuro plantearse hoy en día el regreso del embajador' de Marruecos en España -llamado a consultas por el rey Mohamed VI hace más de cinco meses- si bien reconoció que 'existen actualmente señales positivas que se situan en esta perspectiva'.
En una entrevista concedida al semanario Maroc-Hebdo, Benaissa afirmó que 'es totalmente inaceptable escuchar a los responsables españoles repetir y pretender que no comprenden y no conocen las razones por las cuales el embajador Baraka ha sido llamado a consultas'. 'Este tipo de discurso debe cesar (...)'.
El presidente del Gobierno, José María Aznar, reiteró el pasado jueves, en una rueda de prensa, que compete a Rabat decidir si su embajador se reincorpora a su puesto dando así a entender que su Ejecutivo no tiene por qué hacer gesto alguno para facilitar esa iniciativa. 'El Gobierno de Marruecos tomará su decisión, o no la tomará', declaró. 'Es su responsabilidad, la de volver a nombrar embajador en España'.
Benaissa achacó la llamada a consultas de Baraka 'al descontento del Reino de Marruecos a propósito del nivel inapropiado de diálogo político y de cooperación con un país con el que tenemos un tratado de amistad (...)'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 6 de abril de 2002