El presidente de Vivendi Universal, Jean-Marie Messier, vivió ayer una dura jornada, al tener que afrontar las airadas críticas de los accionistas de la compañía y de los empleados de Canal Plus que aprovecharon la junta general de accionistas para protestar por una gestión que ha llevado a la compañía francesa de medios de comunicación a unas pérdidas de récord de 13.600 millones de euros en 2001.
El discurso de Messier fue interrumpido en numerosas ocasiones por varios accionistas que pidieron su dimisión, mientras que alrededor de 100 empleados de Canal + desplegaron una pancarta en la que se podía leer "14.000 millones de euros de pérdidas. ¿Quién dice que todo está bien?"
Un grupo de accionistas anunció que presentará una demanda para que la Justicia nombre un experto que "clarifique a los accionistas el modo de financiación del consejo y la situación financiera del grupo", según publicó ayer el diario Le Monde.
Messier calificó la junta -que duró más de cuatro horas- de "buena", "tranquila" y "no tan tormentosa como la prensa había predicho", a pesar de que los accionistas rechazaron una propuesta sobre la atribución de stock options (opciones para adquirir acciones) a los asalariados del grupo. Messier señaló que el grupo probablemente convocará una nueva sesión extraordinaria para lograr la aprobación de las stock options ya que necesita esta forma de remuneración para atraer a personas "con talento".
El presidente de Vivendi apeló a los resultados del primer trimestre de 2002, en el que se ha mejorado las previsiones, para afirmar que "las cifras muestran que nuestra funciona". Su beneficio bruto operativo (Ebitda) creció un 18 %, hasta 1.171 millones de euros.
Respecto a la destitución del máximo responsable de Canal Plus, Pierre Lescure, que ha desatado una tormenta política y social en Francia, Messier explicó que la compañía debía salir de una "rutina" de pérdidas continuadas de cinco años. Messier admitió que este despido creará "un periodo de perturbaciones", pero se mostró "confiado" en que se reconozca pronto que "este paso vital creará beneficios para todos. Nuestra prioridad sigue siendo crear valor para los empleados y accionistas de Vivendi Universal".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de abril de 2002