El fiscal de la Audiencia Nacional ha solicitado 54 años de prisión para los miembros del comando Barcelona de ETA José Ignacio Krutxaga, Lierni Armendariz y Fernando García Jodrá por su presunta participación en el asesinato del catedrático y ex ministro de Sanidad Ernest Lluch, ocurrido el 21 de noviembre de 2000 en Barcelona. Por otro lado, la policía detuvo a nueve colaboradores del comando Vizcaya para evitar su fuga.
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El fiscal relata cómo mientras Liarne Armendáriz vigilaba y permanecía al volante del coche en el que luego huyó el comando, García Jodrá y Krutxaga abordaban a Lluch en el garaje de su domicilio y le mataron a tiros. Posteriormente dejaron el vehículo robado en un aparcamiento y lo hicieron estallar para eliminar sus huellas.
Los hechos constituyen delitos de asesinato terrorista, robo, falsificación de documentos y estragos, por lo que el fiscal solicita penas que suman 54 años de cárcel para cada uno de los etarras.
El fiscal igualmente pide 34 años de cárcel para los miembros del comando Andalucía Harriet Iragi y Jon Igor Solana por el intento de asesinato del diputado socialista José Luis Asenjo, al que colocaron una bomba trampa en los bajos de su coche, que estaba estacionado en las inmediaciones de su domicilio en Málaga.
Por otro lado, la policía detuvo ayer a nueve colaboradores del comando Vizcaya de ETA, que habían sido condenados a 7 años de prisión por la Audiencia Nacional. La medida fue adoptada antes de notificar la sentencia en previsión de que los colaboradores de la banda terrorista pudieran evadirse. Entre los arrestados figura el juntero de Batasuna por Álava, José Luis Blanco.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 14 de mayo de 2002