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Gendarmes marroquíes ocupan un islote español deshabitado cerca de Ceuta

Enviadas a la zona patrulleras de la Armada española y de la Guardia Civil

La toma de Perejil al mediodía por los gendarmes de Marruecos se produce sólo una semana después de que el ministro de Exteriores marroquí, Mohamed Benaissa, llamase al embajador español para pedirle explicaciones por el desembarco en Alhucemas de cinco fragatas de la Armada española y un helicóptero. Se trataba de un ejercicio de fin de curso de los guardamarinas de la Escuela Naval de Marín (Pontevedra), que dentro de unos días recibirán sus despachos.

Las explicaciones españolas sobre el incidente de Alhucemas no convencieron a las autoridades marroquíes.

Los últimos inquilinos conocidos de la isla de Perejil fueron un cabo y cuatro soldados españoles que se retiraron en los años sesenta. El Estatuto de Autonomía de Ceuta no recoge en su texto el islote de Perejil.

El tratado hispano-francés de 1912 que delimita la zona del Protectorado español de Marruecos, no hace referencia a Perejil, pero tras la formalización del protectorado, el islote junto a Ceuta pasó a plena ocupación española.

Fuentes diplomáticas españolas relacionaron la entrada de militares marroquíes en Perejil como la respuesta de Marruecos, un día después del nombramiento de la nueva ministra española de Exteriores, Ana Palacio, al incidente de la semana pasada en Alhucemas. España pidió anoche explicaciones a Marruecos sobre este incidente.

El Gobierno marroquí, que considera que la isla es parte integrante de su territorio, reconoció anoche que sus gendarmes habían ocupado el peñón en el marco de una operación contra el terrorismo y la inmigración ilegal en el Estrecho.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 12 de julio de 2002