Richard Grasso, presidente de la Bolsa de Nueva York, adelantó ayer, horas antes de conocerse la quiebra de WorlCom, que están servidas las condiciones para un lunes de estampida vendedora en los mercados, porque a viernes horrorosos, como el pasado, siguen lunes muy duros. Grasso pidió paciencia, tranquilidad y visión de futuro a los inversores.
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"Los lunes que siguen a viernes con caídas siempre son difíciles, y sospecho que el de mañana no será diferente", declaró Grasso en el programa de actualidad política Meet the Press, de la cadena de televisión NBC. El Dow Jones, el índice de los principales valores industriales de Wall Street, cedió el viernes 390 puntos, una pérdida del 4,6%, la mayor en un sola jornada registrada en 2002 y la séptima más aguda de la historia. Esa caída remataba un desplome del 14% en lo que va de mes.
Grasso invitó a los inversores a no sucumbir al pánico y pensar en el largo plazo. "Por favor, sean pacientes", dijo. Grasso reclamó mano dura contra los gestores que incurren en fraude. Sendos comités del Senado y de la Cámara de Representantes han empezado ya a discutir a puerta cerrada el proyecto de ley que incrementará las penas de prisión para los defraudadores.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 22 de julio de 2002