El delegado del Gobierno para la Extranjería, Ignacio González, anunció ayer que el próximo año dispondrá de 8.617.000 euros para repatriar inmigrantes indocumentados, lo que supone un incremento del 186% respecto al presupuesto del año anterior. También reveló que el Ministerio de Asuntos Exteriores negocia con Bruselas la inclusión de Ecuador en la lista de países a los que se exige visado en el territorio Schengen.
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Durante su comparecencia ante la comisión de Justicia e Interior del Congreso de los Diputados para explicar los presupuestos de su departamento, González explicó que el incremento presupuestario se debe a que este año están siendo repatriados tres veces más extranjeros que el anterior.
Para demostrarlo, afirmó que la cifra de expulsiones, devoluciones y retornos desde enero asciende a 52.283 personas. El delegado no precisó cuántas órdenes de expulsión han sido dictadas y cuántas de ellas efectuadas, lo que daría una idea del éxito o el fracaso de la política de expulsiones del Gobierno. De ahí que el diputado socialista Jordi Pedret le reprochara la partida destinada a repatriaciones, "cuando el Gobierno ha demostrado su incapacidad para la devolución de inmigrantes".
El delegado del Gobierno dijo que han sido destinados más de 400.000 euros para implantar el sistema informático Eurodac, que permite la comparación de huellas de los demandantes de asilo en todo el territorio Schengen (todos los países de la Unión Europea, excepto Grecia, Irlanda y el Reino Unido, más Islandia y Noruega). Además, afirmó que dispondrá de medio millón de euros adicionales para mantener los centros de inmigrantes existentes y para poner en marcha otros.
"Nada para integración"
A juicio de los socialistas Jordi Pedret y Delia Blanco, existe "una clara diferencia entre los objetivos proclamados [en el Programa Global de Regulación y Coordinación de la Extranjería en España, conocido como Plan Greco] y los presupuestos proyectados". En este sentido, subrayaron: "No hay nada programado en materia de integración".
González adelantó que el Ministerio de Asuntos Exteriores negocia con Bruselas la inclusión de Ecuador en la lista de países a los que se exige visado en el territorio Schengen, y que la decisión podría tomarse durante la presidencia danesa, es decir, antes de fin de año.
El delegado de Extranjería dijo también que el Gobierno ha comunicado a CiU que no respaldará la moción del grupo catalán para que las autonomías gestionen el cupo anual de extranjeros que pueden venir a trabajar en España.
La publicación de la existencia de negociaciones entre el PP y CiU para la cesión de la gestión del contingente había causado una fuerte polémica. La secretaria de políticas sociales y migratorias del PSOE, Consuelo Rumí, manifestó que se trataba de "una dejación de responsabilidades" de carácter "inconstitucional" y que estaba destinada a "encubrir el fracaso del Ejecutivo". Ayer, Rumí se felicitaba: "El Gobierno otra vez ha rectificado y nos ha dado la razón, a pesar del acuerdo al que había llegado con CiU".
El portavoz de CiU, Carles Campuzano, declaró que su grupo aún discutía la moción con el PP, aunque no había cerrado ningún acuerdo y se evidenciaban discrepancias de fondo en cuanto a la cesión de la gestión del cupo. "Ahora trabajamos para aumentar la participación de las comunidades autónomas", dijo. En este aspecto están de acuerdo el Gobierno y el PSOE.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 11 de octubre de 2002