El presidente del Gobierno, José María Aznar, lanzó ayer el mayor ataque contra el PSOE y su líder, José Luis Rodríguez Zapatero. Acusó al primer partido de la oposición de 'poner en riesgo' la estabilidad constitucional de España y exigió a Zapatero que 'explique por qué y para qué quiere cambiar la Constitución' y los Estatutos de Euskadi y Cataluña. El líder del PP proclamó que el PSOE 'no es un partido, sino varios; no tiene un proyecto, sino que de vez en cuando dice alguna cosa; no tiene buenos equipos, y no tiene determinación para hacer las cosas'. Defendió que el PP sí tiene de todo.
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Aznar aprovechó ayer un almuerzo con militantes del Partido Popular en Ávila para poner la puntilla a las acusaciones que iniciaron Jaime Mayor y Javier Arenas el lunes y el martes en Trujillo (Cáceres). Con el argumento de que el PP 'es un partido' y el PSOE son 'uno o dos o cuatro o 17', el presidente del Gobierno acusó a innombrados dirigentes socialistas de ir 'por toda España y decir cosas sorprendentes' que 'afectan a la estabilidad constitucional' de España. Tras exigir a Zapatero que explique 'por qué y para qué quiere [el PSOE] reformar la Constitución y los Estatutos de autonomía vasco y catalán', Aznar le reclamó asimismo explicaciones de por qué no quiere apoyar 'la alternativa política', es decir, la unidad del PP y el PSOE en Euskadi, 'que falta hace, y no un Gobierno de concentración' entre socialistas y nacionalistas vascos.
Frente a este panorama socialista que, según Aznar, amenaza incluso la estabilidad institucional, el presidente colocó a su partido, que 'defiende la Constitución y la organización autonómica y no ve ventaja en el cambio'.
Los socialistas, según el líder popular, 'no son un partido, son varios que hacen lo que les da la gana en cada sitio; no tienen un proyecto, a veces se les ocurre una cosa y la dicen; no tienen buenos equipos y no los pueden presentar; y no tienen detrás nada, cuando hay que tener convicciones y mantenerlas'.
La 'ambición' de Cernuda
José María Aznar conmemoró ayer en Ávila sus inicios en la política de Castilla y León. Aprovechó para presumir de que 'nadie' le 'ha regalado nunca nada', sino que todo lo ha logrado 'con esfuerzo' pues, añadió, no conoce otro valor que ése. 'A nadie le debemos nada. Nada más que a nuestro esfuerzo y a tantas personas de bien que han confiado en nosotros. Hoy son millones'.
Si ésa fue su tarjeta de presentación, concluyó recitando la última estrofa del poema Peregrino de Luis Cernuda: 'Sigue hacia adelante y no regreses, fiel hasta el fin del camino y tu vida, no eches de menos un destino más fácil, tus pies sobre la tierra antes no hollada, tus ojos frente a lo antes nunca visto'. Aseguró que esta estrofa resume 'la España ambiciosa que queremos'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 7 de noviembre de 2002