Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

Padrón y el viaje de su familia al Mundial que nadie ha pagado

"En la federación no hay corrupción". Ángel Villar, su presidente, salió en defensa de Juan Padrón, su vicepresidente encargado de los asuntos económicos y sobre el que pesan denuncias de presuntas irregularidades, como el pago de viajes de familiares con dineros federativos, además de ser representante en su tierra, Canarias, de la marca Puma, que proporciona ropa deportiva a las federaciones territoriales.

"Es falso que la federación haya pagado viajes de mis familares a Japón y Corea durante el Mundial que se jugó el verano pasado, así como tampoco a China", aseguró Juan Padrón. "Los pagaré yo cuando lo crea oportuno y la agencia de El Corte Inglés, que trabaja con la federación, me lo pida y realice la factura correspondiente".

El vicepresidente de la federación, además, indicó que los viajes anteriores que hizo como directivo y acompañado de su mujer, los ha pagado todos. "He liquidado todos los gastos personales", añadió, "Tengo un certificado. ¿De quién? Del administrador de la federación, por el que a 31 de diciembre pasado no debo absolutamente nada". Esta afirmación contrasta con el hecho de que, según el propio Padrón, aún no ha pagado el viaje de su familia al Mundial.

Juan Padrón, por otro lado, rechazó cualquier responsabilidad en el contrato de la federación con la marca Puma por el que ésta vende ropa deportiva a las federaciones territoriales, y de la que es representante desde 1985, tres años antes de que accediera a ser vicepresidente de Villar. "El anterior secretario general de la federación [Gerardo González] fue la persona que se encargó de negociar este contrato, sus precios y los términos del mismo", manifestó Padrón.

Villar aclaró, por otro lado, que dicho contrato se ofreció a otra marca de ropa deportiva, Adidas, que es la que viste a las diferentes selecciones nacionales. "Fue rechazado", explicó el presidente, quien aprovechó la oportunidad, además, para expresar su apoyo a Padrón. "Este señor no es un corrupto", dijo Villar, quien justificó las acusaciones y denunciar vertidas sobre su vicepresidente como "un intento de linchamiento".

Villar confesó que los días pasados han sido los peores momentos de su cargo, al que accedió en 1988. Pese a ello, aseguró que no ha pensado en dimitir ni en convocar elecciones anticipadas. "Estoy más fuerte que nunca. Estas cosas tan desagradables me dan más fuerza".

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de febrero de 2003