La dieta mediterránea disminuye significativamente los síntomas de la artritis reumatoide, pero hacen falta seis semanas para que la dieta haga efecto, según demuestra un estudio sueco a pequeña escala publicado en la revista Annals of the Rheumatic Diseases. Los investigadores han llegado a esta conclusión tras estudiar a 26 personas con artritis reumatoide cuya dieta controlada era de tipo mediterraéno (rica en frutas y verduras, y con aceite de oliva) frente a otros 25 pacientes con artritis alimentados con una dieta de tipo occidental.
Los pacientes fueron evaluados clínicamente al comienzo del estudio, al final de la tercera semana, transcurridas seis semanas, y de nuevo tras 12 semanas. Se utilizaron varios métodos de medición, incluida la actividad de la enfermedad, reflejada en el dolor y la hinchazón, la función física, la calidad de vida y el uso de fármacos antiinflamatorios. Entre las mediciones secundarias se encontraban indicadores bioquímicos, gravedad del dolor y una prueba estándar de sujeción.
Los investigadores pudieron constatar que a partir de las seis semanas, el índice de actividad inflamatoria empezó a descender. Transcurridas las 12 semanas, la función física y la vitalidad también habían mejorado y, en total, 9 de las 14 variables estudiadas también habían evolucionado favorablemente.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 25 de febrero de 2003