Programas aguados
R. G. G. | Madrid
En Estados Unidos, uno de cada tres adolescentes que ven en televisión más de 150 escenas en las que se consumen cigarrillos acaban fumando. En Brasil, el color del pelo de las presentadoras marca las tendencias estéticas de miles de mujeres. Son ejemplos del poder de la pequeña pantalla sobre las costumbres de los espectadores. En España, sin llegar a estos casos, se ha comprobado cómo la televisión estandariza los hábitos. Por ejemplo, en el consumo del agua.