El periodista marroquí Ali Lmrabet, de 44 años, que cumple una condena de tres años de cárcel por "injurias al rey" inició ayer una huelga de hambre en protesta por el acoso al que está sometido en la prisión y para reivindicar el estatuto de preso de opinión, según informaron miembros de su familia a los que comunicó por teléfono su decisión.
Lmrabet, que en mayo y junio ya estuvo 50 días en huelga de hambre para protestar por su condena, inició esta vez su huelga en compañía de Mohamed el Hurd, director del semanario Asharq, de Ujda, que en agosto pasado también fue condenado a tres años por apología del terrorismo tras publicar un artículo de opinión de un islamista. Otros dos periodistas de esa ciudad han sido condenados por el mismo delito pero, por ahora, no han ingresado en prisión.
En la conversación telefónica con su familia Lmrabet denunció que había sido agredido por un guardián. En las últimas semanas se había quejado también del creciente aislamiento al que estaba sometido -las autoridades penitenciarias prohibían de hecho a los demás reos conversar con él- así como de las amenazas que le habían proferido varios funcionarios de prisiones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 1 de diciembre de 2003