La fiscalía ha informado a favor de que se admita a trámite un recurso de nulidad contra la sentencia dictada por la Sección Segunda de la Audiencia de Barcelona que absolvió a un empresario y un aparejador del accidente laboral que sufrió el albañil Enrique Pociños y que le dejó parapléjico. Esa sentencia anuló la que dictó un juzgado penal de Mataró, que concedía al obrero una indemnización de 381.548 euros más intereses y ya no podía recurrirse contra ella. Por ese motivo, la abogada Dolors López Guijo pidió la nulidad de la polémica sentencia acogiéndose a un artículo de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que lo permite cuando existe incongruencia entre el fallo y los razonamientos jurídicos de la sentencia.
En este sentido, el escrito de la acusación considera "inexplicable" la absolución de los acusados porque en los hechos probados de la sentencia se constata que en la obra no existían medidas de seguridad y no se analiza la relación entre la conducta de los acusados y el accidente que sufrió el albañil. El escrito de nulidad insiste en "el que ha cometido el delito no es el trabajador", sino el empresario, porque la polémica sentencia admite que los acusados eran tan responsables del accidente como el albañil.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 3 de diciembre de 2003