Rafá Zouhier y Antonio Toro Castro coincidieron unos meses en el mismo módulo de la cárcel de Villabona. Sobre eso hablaron ante el juez.
rafá zouhier. Cuando coincidí con Toro en la cárcel de Villabona, un día vi cómo enseñaba un papel a Suárez Trashorras en el locutorio, poniéndoselo en el cristal del locutorio, pero no sé si el teléfono era de gente de ETA.
toro castro. Ese teléfono era de Paloma, mujer de Sabino, que era el que vendía drogas en la cárcel.
rafá zouhier. Yo estaba hablando con mi novia, y estaba atento a lo que hacía Toro, y vi que enseñaba un papel, pero no vi ni oí nada más. Pero era algo extraño, porque si quisiera pasar algo intrascendente en el locutorio se le dice por teléfono, y si lo escribe en un papel será porque quiere ocultar algo.
toro castro. En el gimnasio de la prisión, con las únicas personas que entrenaba era con Rafá, Nordín y Edu. No había ningún etarra en el módulo 8 en el que Rafá y yo estábamos.
rafá zouhier. Sí había dos etarras, ingresaron cuando yo estaba en el módulo 8. Luego me fui al 7 y ellos se quedaron. Eran jóvenes y hablaron de buen rollo con Toro, aunque no sé de qué hablaban.
toro castro. En el módulo 8 no había ningún etarra.
rafá zouhier. Yo entré después que Toro, y a la semana o las dos semanas entraron los etarras.
toro castro. Yo entré en julio y me fui en diciembre y con los únicos que me comuniqué fue con Rafá y con mi primo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 21 de enero de 2005