El presidente José Luis Rodríguez Zapatero ha confirmado en el debate de esta semana el impulso que quiere dar al Estado de las autonomías, con una descentralización competencial inédita desde que se aprobó la Constitución en 1978, de la que se beneficiarán todas las comunidades que quieran. Argumenta que este impulso, demandado por las propias comunidades, responde a la necesidad de acometer nuevas demandas -inmigración, justicia e innovación tecnológica- y corregir errores del funcionamiento del sistema, como la invasión de las leyes de bases a competencias de las autonomías. Quiere completar un modelo descentralizado del que la pieza principal es el Senado reformado, además de la Conferencia de Presidentes. Para llevar adelante este modelo, pretende regresar al "espíritu de 1978" e integrar en los pactos a los partidos nacionalistas.
- Autogobierno. Zapatero ofreció su respaldo en el debate del Estado de las autonomías al nuevo impulso al desarrollo autonómico, con las reformas de los estatutos, que afectará a todas las comunidades y no sólo a Cataluña. Zapatero ha precisado, en el debate, que el aumento del autogobierno implicará una delimitación de las leyes de bases, a las que numerosos gobiernos autonómicos y los partidos nacionalistas acusan de invadir sus competencias; descentralización de competencias de ejecución; un avance en la descentralización de la Justicia; la cesión de más competencias a los gobiernos autonómicos en materia de inmigración y desarrollo tecnológico, y avances en la descentralización local.
- Cooperación. La reforma constitucional del Senado para convertirla en Cámara territorial ha vuelto a plantearla Zapatero en el debate de esta semana, 11 años después de que la planteara González.
En cuanto a las relaciones de las comunidades con la Unión Europea, el Gobierno de Zapatero dio un paso trascendental, hace un año, permitiendo la participación autonómica en los Consejos de Ministros en la Unión Europea.
Hace un año, Zapatero instituyó, por vez primera, la Conferencia de Presidentes y, en el debate de esta semana, ha planteado un pacto de Estado con todas las comunidades para regularla. También ha propuesto la participación autonómica en organismos estatales.
- Financiación. Zapatero ha defendido una reforma del modelo de financiación autonómica con "espacios fiscales propios" para las comunidades con el objetivo de que se responsabilicen de la financiación de su gasto público y terminar con la financiación subsidiada del Estado. Pretende que las comunidades recauden sus propios impuestos, como los cedidos y los especiales; aumente su participación con el Estado en el IRPF, mientras el Estado se reserva los de sociedades e IVA.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de noviembre de 2005