Por primera vez en mucho tiempo, la sesión de control en el Parlamento al presidente de la Junta no se desarrolló en unas condiciones favorables para Manuel Chaves. El desarrollo de la ley de Dependencia en Andalucía, uno de los proyectos estrella del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, provocó una considerable bronca en la Cámara, pero una bronca sin bla-bla-bla con datos y contenido. "Tengo que reconocer que ha habido demora y un desbordamiento de las solicitudes", admitió el socialista en respuesta a Concha Caballero (IU). Ésta animó desde la tribuna de la Cámara a todos los andaluces a que "acudan a los tribunales" para hacer valer un derecho reconocido en la ley. De las 73.479 solicitudes recibidas por la Junta, el 47% (34.939) han sido evaluadas, pero sólo 50 personas recibirán a partir del lunes el dinero.
Tanto la portavoz de IU como la presidenta del grupo popular, Teófila Martínez, cargaron contra Chaves por la "improvisación" en la puesta en marcha de la ley de la Dependencia
al no estar operativos todos los servicios de evaluación, pese a que la Junta aseguró que estarían en perfecto estado de revista.
"Esto es peor que un socavón o una crisis de los trenes de cercanías", dijo Concha Caballero, porque, en este caso, lo que se "defraudan son las esperanzas y usted es el responsable", enfatizó. "No tienen sensibilidad social", le afeó.
Chaves, al menos con IU, no se puso de perfil ni a la defensiva, algo que sí hizo con el PP. Reconoció que hay "demora" en la evaluación de los grandes dependientes (aquellos que necesitan atención las 24 horas), los cuales, según la ley, deberían percibir ayudas a partir del pasado mes de septiembre. También admitió que las peticiones presentadas afectan a dependientes severos, que empezarán a entrar en el sistema a partir de 2008. Y recordó que las ayudas empezarán a recibirse con carácter retroactivo.
El presidente se comprometió a normalizar la situación en el plazo de tres meses. También reconoció el derecho de los ciudadanos a denunciar la situación. "Por supuesto, que vayan a los tribunales si alguien ve conculcado su derecho", dijo.
Teófila Martínez calificó de "caótica" la puesta en marcha de una ley dirigida a personas que no pueden valerse por sí mismas y afirmó que la retroactividad en la percepción de las ayudas, a partir de la fecha de presentación de la solicitud, no es una solución porque "el sufrimiento de una persona con dependencia no es retroactivo".
"No se sulfure"
Según la diputada del PP, la ley de Dependencia es un "marrón" que Zapatero le ha endosado a las autonomías y pronosticó que estás se lo cargarán a los ayuntamientos, la primera ventanilla donde se reciben las solicitudes. "No critico la ley, sino su aplicación porque son ustedes unos
inútiles", subrayó Martínez.
"Le ruego que no se enfade y que no se sulfure y que no llame inútiles a los demás. No tiene usted derecho", le contestó Chaves antes de pasar a la defensiva. Según él, los ayuntamientos también son responsables de la aplicación de la ley de Dependencia y estos las han tramitado con retraso a la Junta.
Chaves se acogió al refrán de "en el país de los ciegos, el tuerto es el rey", para enfatizar que, pese a los retrasos, Andalucía está la cabeza de las valoraciones iniciadas (representan el 55% de total nacional), mientras que comunidades gobernadas por el PP, como Madrid y Murcia, presentan un cero en el casillero.
Las frases
- Concha Caballero: "Esto es peor que una crisis de los trenes de cercanías. Hablamos de defraudar esperanzas. Usted es el responsable. El mensaje es que los andaluces vayan a los tribunales".
- Chaves: "Reconozco que hay demora".
- Teófila Martínez: "No critico la ley, sino su aplicación, porque son ustedes unos inútiles"
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de noviembre de 2007