La Reserva Federal estadounidense (Fed) saltó ayer a escena de la mano del Banco Central Europeo (BCE) para inyectar liquidez en el sistema financiero. Es una medida sin precedentes, "para atajar una crisis global", como dicen los expertos, en la que también participan los bancos centrales de Canadá, Inglaterra y Suiza.
Con los titulares que daban cuenta de una caída del 16% en las ventas de pisos todavía frescos, Pedro Pérez, secretario general del G-14, el lobby que aglutina a las 13 inmobiliarias más grandes del país y a la asociación de promotores madrileña, compareció ayer para dar su visión sobre el cada día más apaleado sector de la vivienda.
Estaban levantando cabeza, pero los precios del petróleo disparados y, sobre todo, la crisis de liquidez en los mercados financieros vuelven a lastrar a las aerolíneas. Tanto, que han recortado las previsiones de beneficio para 2008 en un 35,9%.
El consumo da nuevos síntomas de desaceleración. No sólo frenan las ventas de turismos, sino que las grandes firmas de moda lo comienzan a notar en sus estantes. Inditex, el primer grupo textil europeo, ha sufrido en el tercer trimestre un frenazo en sus ventas, ya que sólo creció el 14,5%, cuando en el primer y segundo trimestre del presente año lo hacía al ritmo del 19%.
Hasta el Vaticano se ha visto obligado a racionar la gasolina. El carburante escasea en Italia hasta el punto de que varias fábricas, incluidas las de la afamada pasta, han echado el cierre temporalmente. Las dificultades de abastecimiento han provocado problemas en la distribución de leche y de varios productos primarios.