Evitar vacilaciones y despejar dudas. Emilio Pérez Touriño ha decidido dar un paso al frente y tomar personalmente el timón del Partido dos Socialistas de Galicia de aquí a la celebración del XI Congreso. La asamblea, que tendrá lugar inmediatamente después del Día Nacional de Galicia, renovará la Ejecutiva del partido que debe confeccionar las candidaturas que el PSdeG presentará a las elecciones autonómicas y desarrollar la estrategia con la que los socialistas gallegos tratarán de disputar al PP el protagonismo en el arco político de Galicia.
MÁS INFORMACIÓN
El problema suscitado por la decisión del PSOE de ordenar la reconstrucción del partido allí donde no existe estructura provincial, como es el caso de Galicia, ha quedado resuelto de común acuerdo entre Touriño y el secretario de Organización del PSOE, el lucense José Blanco. Ambos están de acuerdo en aplazar la celebración de congresos provinciales hasta después de las autonómicas para evitar que interfieran en la preparación de las elecciones.
El secretario general, en "total sintonía" con Blanco ("aunque eso a algunos les pueda preocupar", subrayan fuentes cercanas a Touriño), ha comenzado a celebrar reuniones preparatorias con dirigentes socialistas de toda Galicia para dejar clara su voluntad de liderar la renovación del partido. Touriño quiere introducir cambios para "ensanchar la base" del socialismo gallego y hacer que el PSdeG asuma protagonismo en la transformación de Galicia. Un partido, sostienen las mismas fuentes, basado en los valores del "galleguismo y la socialdemocracia" y capaz de aportar los cuadros dirigentes llamados a desarrollar las propuestas del PSdeG en el Gobierno.
Nadie en el partido otorga ninguna posibilidad de éxito a los movimientos patrocinados por Salvador Fernández Moreda, presidente de la Diputación de A Coruña, y el diputado pontevedrés Modesto Pose para reconstruir la estructura provincial antes de las elecciones. En estos momentos nadie discute el liderazgo de Pérez Touriño al que cada vez más voces piden que lidere una transformación del partido que prepare a los socialistas para convertirse en la fuerza política hegemónica de Galicia en los próximos años.
Sobre la mesa ya existen propuestas concretas que pasan, entre otras cosas, por confeccionar una Ejecutiva más reducida que se reúna cada semana y planifique sus esfuerzos en coordinación en el Gobierno de la Xunta. Una dirección capaz de aprovechar el creciente número de agrupaciones locales nacidas al rebufo del éxito electoral de los últimos años. En cualquier caso, la mayoría de los dirigentes del PSdeG están de acuerdo en que, a unos meses de las elecciones, el partido debe aprovechar el congreso para hacer una demostración de unidad que refuerce su oferta ante los ciudadanos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 2 de junio de 2008