Los dardos que el Gobierno y la patronal llevan cuatro días lanzándose vuelan cada vez más envenenados. "Parte del tejido empresarial que se ha destruido es de cartón piedra. Se necesita una reforma empresarial más que una reforma laboral", comenzó el pasado sábado el presidente José Luis Rodríguez Zapatero.
Juan Ramón Quintás, presidente de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), descalificó a los gobiernos autónomos por considerar que la solvencia de las cajas es un problema regional, cuando es un tema de discusión internacional. También les pidió que no pusieran problemas que frenasen las fusiones, pero no ha tenido éxito.
La crisis no aminora la actividad de la Comisión Nacional de la Competencia (CNC). Los inspectores del órgano que vigila la libre competencia en el mercado estuvieron ayer varias horas en las sedes de varias empresas de producción y suministro de cemento, mortero, hormigón y áridos por haber sospechas de posibles pactos de precios.