Lisa Nowak, oficial de la Marina de Estados Unidos y ex astronauta de la NASA, no irá a la cárcel, a pesar de que se inculpó el martes pasado ante un tribunal de Florida de agresión e intento de secuestro a la capitán de la Fuerza Aérea Colleen Shipman, en un aparcamiento del aeropuerto internacional de Orlando en febrero de 2007. La astronauta se confesó cegada por los celos hacia Shipman, que salía con el ex novio de Nowak, el comandante de la Marina y astronauta William Ofelein.
Declarándose culpable, Nowak, de 46 años, ha evitado ir a prisión de nuevo y ha dado fin a la opereta de un triángulo amoroso caóticamente trazado con viajes de 1.500 kilómetros, misiones de la NASA al espacio, pistolas y pañales. Para evitar una pena mayor, admitió los cargos de intento de robo de un coche y agresión, por los que ha sido condenada a 50 horas de servicios a la comunidad y a ocho horas de clases de técnicas de control de la agresividad. Cuando fue detenida en 2007 ya pasó dos días en prisión.
En el juicio, las dos mujeres se vieron las caras. Shipman, que dejó el Ejército y está prometida con Ofelein, dijo que el incidente le trastocó la vida. "Venía a matarme... lo vi en sus ojos", declaró.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 16 de noviembre de 2009