Iñigo Urkullu, presidente del EBB, cree que Eusko Alkartasuna (EA), su socio en el gobierno foral de Álava, ha ido demasiado lejos en sus ácidas críticas contra la responsabilidad del PNV en el supuesto caso de cohecho en este territorio. Durante una entrevista, ayer en ETB-2, el dirigente jeltzale denunció "el carroñerismo político" de la dirección de EA y del PP vasco. "Si alguien tiene algo que denunciar sabe los caminos que tiene que seguir, pero no el de la mezquindad, el de la ruindad, del carroñerismo político, aprovechándose de una circunstancia que está bajo secreto sumarial, ante la que el PNV ha actuado como ha actuado".
Como era de esperar, EA encajó mal estas críticas y aludió a la bajeza y el "ataque gratuito" que suponen las declaraciones de Urkullu, contra su formación. EA dice no entender "qué ha cambiado" para que los dirigentes del PNV exigieran inicialmente "tolerancia cero" ante casos de corrupción "y ahora se tache de mezquino y ruin a quien pide algo tan sensato como es investigar" los delitos.
Los junteros 'abertzales' de Álava reclama unas cuantas dimisiones
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Pero Urkullu se siente indignado por el comportamiento de EA. Así se explica que aprovechara su primera entrevista tras estallar el escándalo en Álava para fijar sus posiciones, una vez conocidas las dimisiones de tres de imputados. El presidente del PNV defendió la presunción de inocencia de los implicados y mostró su esperanza en que la supuesta trama "quede en nada". Para ello ha solicitado a los jueces que actúen "con celeridad" por el bien "de la imagen política y de la imagen de la Justicia". Además, ha requerido que se levante "cuanto antes" el secreto de sumario para conocer qué delitos se atribuye a los sospechosos. Eso sí, en sus críticas no se olvidó del PP y así lamentó que el presidente de los populares de Álava, Alfonso Alonso, asegure que el PNV "es el enfermo" de este territorio, y aseguró que su partido "no tiene nada que esconder".
A su vez, los junteros de la izquierda abertzale en Álava denunciaron ayer que el PNV pretenda resolver esta cuestión "con unas cuantas dimisiones que sirvan para echar tierra de por medio y cerrar el capítulo lo más rápido posible". En un comunicado, ven el caso de corrupción como "el más grave de la historia de Álava", y anunció que "la trayectoria de la gestión del territorio en las últimas décadas, con el PNV al frente como mayor exponente, que no único, ha llegado a su fin".
[Urkullu aprovechó la entrevista en ETB para advertir al PSOE de que su actitud al proponer la eliminación de los blindajes que tienen algunas empresas mediante la limitación de los derechos de voto quedará "marcada" y "no va a ser apuntada en la barra del hielo".]
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de marzo de 2010