"Se han ido dos pájaros y no se puede ir un tercero". Esta frase que atribuyen al secretario general del PSOE de Cádiz, Francisco González Cabaña, en alusión a Cajasur y CajaGranada, ilustra hasta qué punto los dirigentes socialistas regionales y provinciales de Andalucía están preocupados por la pérdida de comba de las entidades de ahorro andaluzas. En un escenario donde se están produciendo continuos anuncios de uniones virtuales o reales de las cajas españolas, los responsables socialistas consideran "una necesidad imperiosa" que el Gobierno andaluz fije una posición y apueste de manera decidida y "urgente" por una gran caja andaluza.
Esta opinión fue suscrita unánimemente por los miembros de la comisión permanente de la ejecutiva regional y por siete de los ocho secretarios generales provinciales en una reunión celebrada el lunes pasado. La cita estaba convocada para que el presidente andaluz y secretario general, José Antonio Griñán, avanzara los trazos gruesos de su intervención en el debate de la comunidad, pero derivó en una discusión clarificadora y productiva, además de acalorada y tensa, según varias fuentes. Griñán no asistió a esta parte de la discusión.
"Yo no autoricé esa operación", aseguró Velasco a la líder socialista de Granada
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La temperatura de la reunión subió algunos grados cuando empezaron los reproches directos hacia la secretaria general del PSOE de Granada, Teresa Jiménez, por la decisión de CajaGranada de firmar un protocolo de fusión fría con otras tres entidades foráneas, liderada por Caja Murcia. En concreto, el que dio pie a esa crítica fue el secretario de Acción Electoral, Miguel Ángel Vázquez, quien pidió explicaciones de por qué los socialistas que se sientan en el consejo de administración de la entidad granadina habían apoyado esa decisión que va en contra del proyecto estratégico del PSOE. Otros secretarios generales, como Cabaña, José Antonio Viera (Sevilla) y Juan Pablo Durán (Córdoba) insistieron también en esa reflexión. Durante su turno de intervención, Jiménez aseguró que CajaGranada no estaba haciendo nada que no se conociera y que si había otra hoja de ruta se expusiera. Aludía así a que el Gobierno andaluz dejó hacer o miró para otro lado cuando la caja trababa acuerdos para el SIP, porque en ese momento estaba centrado en la fusión de Unicaja y Cajasur, frustrada de sopetón por la Iglesia cordobesa. "Yo no autoricé esa operación", dijo tajante el vicesecretario general, Rafael Velasco. El número dos del PSOE, además, enfatizó la necesidad de ir a un proyecto de concentración.
Este mensaje, apoyado por todos, fue el que como conclusión resaltan todas las fuentes consultadas. Ahora, la pelota está en manos del Gobierno que aún no tiene cerrada una posición, pero que la definirá en las próximas semanas. Los titubeos que ha mantenido hasta ahora los empezó a despejar Griñán el jueves por la noche en la SER, cuando reconoció: "Estamos viendo de qué manera podemos unir los esfuerzos de las cajas de Andalucía para crear esa gran entidad financiera andaluza".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de junio de 2010