La empresa de tecnologías de la información Amper cerró el año 2003 con unos beneficios netos de 0,64 millones de euros frente a los 0,15 del año anterior, gracias al incremento del resultado ordinario: 5,6 millones frente a las pérdidas de 0,48 millones de hace un año.
En el balance anual presentado hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), se refleja que el resultado bruto de explotación (EBITDA) fue de 13,27 millones de euros, un 59% más que hace un año, mientras que el resultado neto de explotación (EBIT) de 8,26 millones, un 383% más. La cifra de negocio a 31 de diciembre de 2003 alcanza los 207,88 millones de euros frente a los 218,86 millones de un año antes.
Durante el pasado ejercicio, Amper llevó a cabo drásticas reestructuraciones para recortar su deuda, lo que empieza a dar sus frutos. Lo más importante para la compañía, pasar de un endeudamiento neto de 14,73 millones de euros a disponer de una tesorería neta de 5,12 millones. Según el comunicado emitido hoy, la eliminación de su deuda sitúa a la veterana subcontratista de Telefónica en una buena posición ante la posibilidad de abordar nuevos proyectos. El principal, transformarse por completo para centrar su actividad en los sectores de defensa y seguridad. En los últimos años, ha dejado de ser un grupo de telecomunicaciones para convertirse en un potente fuerte proveedor de soluciones de comunicaciones civiles y militares (ingeniería, redes, software y sistemas), de radiocomunicaciones militares y de sistemas de mando y control.
Amper está participada en un 12,20% por Tecnocom y en un 6,10% por Telefónica, mientras que el fondo de inversión estadounidense Arlington Capital Investor tiene un 5,80%. Según datos de la propia compañía un 3,65% pertenece a la autocartera y el 72,24% restante es capital flotante. En lo que va de año, sus títulos acumulan una subida en Bolsa del 21,86% y se convierte en el segundo mejor valor del Nuevo Mercado, justo después de su principal accionista, Tecnocom, que sube un 41,61% desde que arrancó 2003.