El material pertenece a un procedimiento judicial abierto cuando la Ertzaintza desactivó una bomba en el área de influencia del Juzgado de Tolosa, aunque las fuentes citadas no han precisado cuándo ni en qué lugar concreto se colocó el artefacto.
La Policía Autónoma Vasca desactivó entonces la bomba y elaboró un atestado que remitió, acompañado de los componentes del artefacto, a la Audiencia Nacional, al considerar que se trataba de pruebas de un delito de terrorismo de su competencia.
Devuelto por correo
No obstante, la Audiencia Nacional decidió que la competencia para investigar la colocación de esta bomba correspondía al Juzgado de Tolosa, por lo que devolvió por correo el material a un juez de la citada localidad guipuzcoana.
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El paquete con las pruebas judiciales ha llegado esta mañana al Juzgado de Tolosa y ha provocado la alarma de los ertzainas encargados de la custodia de este edificio, al comprobar en el escáner de seguridad la presencia en el interior del sobre de pilas y cables, componentes habituales de los artefactos explosivos.
Los ertzainas han procedido a desalojar inmediatamente a los trabajadores del inmueble y de un ambulatorio cercano.
Desplazados al lugar artificieros de la Ertzaintza, con perros adiestrados, han comprobado que no se trataba de una bomba, por lo que una hora y media después de ser desalojados, los trabajadores de los dos centros han vuelto a sus puestos de trabajo.