La policía y la Guardia Urbana de Barcelona han desarticulado la que ha sido considerada la mayor red de pirateo musical de España, que podría haber falsificado hasta seis millones de discos compactos y estafado a las productoras varios millones de euros, además de explotar laboralmente a tres menores. En la operación se ha detenido a 12 personas, siete ciudadanos de Bangladesh, uno de la India y otro de Pakistán, además de tres menores, de 9, 12 y 15 años.
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Los menores eran utilizados por los jefes de la banda para hacer las copias falsas, que podrían haber llegado a los seis millones de falsificaciones de los discos más vendidos del momento, tanto de artistas nacionales como internacionales, según las fuentes policiales consultadas. La policía ha informado hoy de que los tres menores se encontraban en una "clara situación de explotación laboral infantil".
Hasta cuatro brigadas y comisarías policiales han intervenido en la desarticulación de la banda, en el marco de una operación bautizada con el nombre de Nuria, y se han registrado un total de seis pisos, en Barcelona, Santa Coloma de Gramenet y Badalona.
La policía ha intervenido a los piratas 60 grabadoras de discos compactos, muchas las cuales reflejaban en sus contadores que se habían efectuado más de 100.000 copias, además de dos fotocopiadoras en color, 27.048 discos compactos listos para vender mediante una red de vendedores callejeros, 15.434 carátulas y 8.334 cajas de CD's.
Infraestructura
La banda grababa los discos en un piso, en otro tenían instalada las fotocopiadoras para las carátulas, en otro las cortaban con guillotinas para montarlas en las cajas y en el resto se llevaban a cabo las labores de distribución de las copias a los manteros.
El principal zulo de la banda era un local de la calle Pompeu Fabra de Santa Coloma de Gramenet, camuflado bajo la apariencia de un locutorio y un videoclub, donde se confeccionaban las cajas y las carátulas de los discos compactos.